Roma

El Papa afirma que la sociedad intenta sustituir la fe con otras riquezas

Benedicto XVI ha realizado este domingo su primera visita a la República de San Marino, uno de los países más pequeños del mundo y ha declarado durante la misa celebrada en el estadio de 'Serravalle' que la sociedad "intenta sustituir la fe y los valores cristianos con presuntas riquezas"que se muestran "inconsistentes e incapaces de regir la gran promesa de la verdad, del bien y de la justicia".

Así, el Papa ha destacado que el mundo de hoy "insinúa la tentación de creer que la riqueza del hombre no es la fe, sino su propio poder personal y social, su inteligencia, su cultura y su capacidad de manipulación científica, tecnológica y social de la realidad".

En este sentido, Benedicto XVI ha señalado que los cristianos se enfrentan "a numerosas dificultades y obstáculos"en una sociedad que muestra "modelos hedonistas que obturan la mente y pueden anular cualquier moralidad".

Además, el Papa ha subrayado que "no debemos olvidar la crisis que viven no pocas familias, agravada por la difundida fragilidad psicológica y espiritual de los padres, como también la fatiga experimentada por muchos educadores para obtener la continuidad formativa de los jóvenes, condicionados por la precariedad, sobre todo en la sociedad y en el campo laboral".

Por otra parte, el Pontífice ha advertido que "en el mundo está el mal, hay egoísmo, hay maldad"y Dios "podría venir para juzgar este mundo, para destruir el mal, para castigar a aquellos que operan en las tinieblas"pero ha destacado que, por el contrario "Dios muestra que ama el mundo, ama al hombre, a pesar de su pecado"y le entrega "su don más preciado que es Jesucristo".

Ante más de 20.000 fieles congregados en el estadio de Serravalle, el Pontífice ha recordado a los sanmarinenses que su riqueza "es la fe"que ha creado "una civilización verdaderamente única"y ha subrayado que "es necesario recordar la absoluta fidelidad al Obispo de Roma, a la cual esta Iglesia ha mirado con devoción y afecto".

Asimismo, el Papa ha destacado que "el modo mejor de apreciar la herencia de la fe es cultivarla y enriquecerla"y ha recordado que los cristianos están llamados a desarrollar "el depósito"de la fe en un momento "decisivo"de la historia.

Por último, Benedicto XVI ha exhortado a todos los fieles a ser "fermento del mundo"y ha pedido a los cristianos que sean "coherentes"con su fe, así como ha invitado a los religiosos y sacerdotes que vivan siempre "en comunión eclesial"con el obispo.