Las millonarias cifras de recaudación contrastan con las acciones que desarrolla la Junta para que los ciudadanos dejen de fumar. La previsión del Gobierno andaluz es que, con el endurecimiento de la ley, se reduzca el número de fumadores en un 11 por ciento. Según una reciente encuesta, una de cada tres personas fuma en Andalucía. Una cifra que fue tachada de «inaceptable» por la consejera de Salud, María Jesús Montero. Por ello, la Administración autonómica desarrolla el Plan Integral de Tabaquismo, con especial incidencia en los ámbitos educativo y laboral. De esta manera, se llevan a cabo campañas de comunicación, información y sensibilización sobre los efectos nocivos del tabaco. También se promueve la formación de los profesionales y se fomenta la investigación en materia de tabaquismo, como medios para avanzar en el conocimiento y el tratamiento de esta enfermedad y sus consecuencias. La Consejería de Salud cuenta con una red de formadores dedicados a informar de los efectos del tabaquismo y los recursos con los que cuentan las personas que quieran dejar de fumar. La web de la consejería incluye una comunidad virtual para que estos formadores compartan sus experiencias y compartan material didáctico.