Artistas

Los miércoles sin «Hola»

La Razón
La RazónLa Razón

Desolación total es lo que te invade cuando llegas al quiosco y pides las revistas. En ese momento crucial te dicen: «‘¡Hola!' no llega hasta mañana»; y, claro, cómo organizas tu vida sin la «más» de todas las publicaciones. Los miércoles sin «¡Hola!» son un suceso para el que nunca estás suficientemente preparado. Tus comentarios radiofónicos, tus relaciones de amistad y de familia, carecen de sentido. En esas horas te das cuenta de tu total adicción, de la que no te puedes recuperar sin previo aviso y una terapia adecuada. Como es hasta lógico, recibes el rechazo desde Onda Cero de Madrid, que, claro, allí sí tienen el ejemplar en las manos. Te sientes un pobre provinciano, carente de la mejor herramienta para tu trabajo. Al tiempo padeces todo el peso del centralismo o del nacionalismo madrileño sobre tu ancho pecho, no dejándote ni respirar. Terminas yéndote a pasear junto al río Guadalquivir. En ese momento de soledad, dudas si saltar y llegar nadando hasta Coria. Ya más relajado por el esfuerzo y totalmente empapado, lo que procede es pedir un Dry Martini en uno de los bares de la orilla, que, como todo el mundo sabe, es un centro de la coctelería internacional. Afortunadamente, en un segundo de cordura, comprendí que no estoy en forma para semejante odisea, que estas gestas sólo están al alcance del siempre rutilante David Meca. El «mono» me ataca de nuevo y me pongo a cantar a gritos aquella copla que decía: «Maldigo tus negras cenizas, te maldigo volcán de Islandia con tus humos espesos, que han dejado los ‘pursos paraos' a los aviones». Ésta es la causa de la no llegada de lo único que calma mi ansiedad. Como decía Perales, me han quitado un trozo de mi vida; qué miércoles de ceniza tan duro, sin un «¡Hola!» que llevarse a los ojos.