Barcelona

«Que una ampolla no frene la revolución»

Se ultiman ya los preparativos para que los «indignados» de toda España (y parte del extranjero) tomen las calles mañana domingo. «Indignados» de todo el territorio nacional dedicaban la tarde de ayer a preparar carteles y estandartes para las marchas.

Con lupa vigilarán las Fuerzas de Seguridad a los «indignados» que tomarán las calles mañana. Precisamente para evitar una marcha sobre el Congreso de los Diputados, la Policía instalará un férreo dispositivo policial
Con lupa vigilarán las Fuerzas de Seguridad a los «indignados» que tomarán las calles mañana. Precisamente para evitar una marcha sobre el Congreso de los Diputados, la Policía instalará un férreo dispositivo policiallarazon

Y proseguían las incontables convocatorias en foros, redes sociales, blogs y páginas web, así como toda clase de iniciativas para hacer más llevadera la marcha del 19-J, que así se ha denominado. Consejos como hidratarse en todo momento y llevar agua, protegerse del sol con gorras o alimentarse correctamente, así como llevar productos energéticos, parecen evidentes. También, que se acuda a las marchas con calzado apropiado. Y es que, tal y como dice la consigna que sigue al consejo: «Un par de ampollas molestas en los pies no puede frenar la revolución».

Pero más allá de los consejos «domésticos», el colectivo trata por todos los medios de desterrar el estigma ganado con creces el pasado miércoles en Barcelona. La mayoría de mensajes en las redes sociales se centran en evitar cualquier signo de violencia que pueda empañar sus marchas, y por lo que pudiera pasar, se curan en salud. Pero por si algún violento, que ellos no han invitado, se les cuela en su marcha, recomiendan «hacer un hueco entre los alborotadores y la marcha» para tratar de aislarlos sin atender a la dificultad que significaría llevarlo a cabo.

U otra opción, la de sentarse en el suelo ante posibles cargas policiales, como las producidas ante el Parlament de Cataluña. Sin olvidar de prevenir a los asistentes de los polémicos policías infiltrados de paisano que podrían «reventar la marcha». Precisamente, sobre los hechos del miércoles, tres portavoces «indignados» de Barcelona evitaron ayer hacer autocrítica, alegando que hablaban a título individual, pese a que la rueda de prensa estaba hecha en nombre del colectivo AcampadaBCN. Y aún más sorprendente es que aseguraran que la intención era hacer un cordón simbólico para demostrar su rechazo a los presupuestos y que, en ningún caso, pretendían impedir la entrada de los diputados en el Parlament.

No obstante, al margen de que se han desmarcado de la violencia, la Policía no escatimará en efectivos para garantizar la normalidad. Sólo en la capital, casi un millar de policías velarán por la seguridad el domingo, incluido un férreo perímetro de seguridad en torno al Congreso. A excepción de dos unidades, una de ellas en San Sebastián, todos los grupos de la primera Unidad de Intervención Policial se repartirán por las calles de Madrid, más de la mitad –unos 500 o 600– serán antidisturbios.

Llamazares les abre el Congreso
El diputado de Izquierda Unida en el Congreso, Gaspar Llamazares, registró ayer una interpelación para que la próxima semana se debata sobre el movimiento 15-M para evitar «una fractura entre la sociedad civil y la política». No es la primera vez que se hablará del movimiento en la Cámara, pero sí es la primera vez que los diputados tendrán que votar sobre dichas reivindicaciones. Eso sí, habrá que esperar hasta el mes de julio para comprobar las posiciones de los partidos, ya que la siguiente sesión plenaria corresponde al Debate sobre el estado de la Nación. En su propuesta, Llamazares señala al capitalismo y sus responsables como el origen de la «indignación» de los ciudadanos.