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Jalid Naciri ministro de Comunicación marroquí: «Los islamistas pierden fuerza en Marruecos»

Somos el único país árabe donde los manifestantes no se enfrentan a la violencia del Estado. Haremos todo lo posible para que no se produzca otra crisis con España. El cliché europeo no es cierto: Los islamistas han perdido mucha fuerza en Marruecos.

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-Con la visita del rey Juan Carlos a Marraquech se cierra una etapa de crisis bilateral. ¿Hasta cuando no tendremos otra crisis?
-La visita del rey Juan Carlos ha sido un gesto muy apreciado en Marruecos como primer jefe de Estado que ha venido a Marraquech tras el atentado. Ahora lo que es importante para Marruecos es mantener las relaciones con España al nivel más alto posible. Nosotros haremos todo lo para que no se produzca otra crisis porque el interés de los países dos países es una buena cooperación.

-¿Hasta qué punto influye el contencioso del Sáhara en las protestas marroquíes sobre Ceuta y Melilla?
-Hay desacuerdos. Fundamentalmente sobre Ceuta y Melilla, más que sobre el Sáhara. Creo que debemos discutir amigablemente sobre las dos ciudades como las dos naciones grandes que somos. Creo que por parte del Gobierno español hay una posición constructiva para apoyar una solución política y negociada sobre el problema del Sáhara. El apoyo al Plan de Autonomía en el marco de la soberanía marroquí es un acto que abre una perspectiva de paz en la región.

-En la última crisis por el Sáhara, los medios de comunicación sólo tratamos de hacer nuestro trabajo pero acabamos pagando los platos rotos de la crisis. ¿Usted cree realmente que las críticas a nuestro trabajo fueron justas? Los medios tratamos de hacer nuestro trabajo pero se nos impidió hacerlo.
-La verdad es más complicada. Marruecos es un país abierto y respetuoso con la prensa. La prensa española acreditada en Marruecos es la nacionalidad más numerosa de los extranjeros. Y siempre son bienvenidos. Trabajan en plena libertad porque somos una dictadura aunque algunos periodistas españoles lo digan. Lo que pasó con algunos periodistas españoles en particular es que faltaron a su deber profesional y deontológico defendiendo voluntariamente falsedades. Eso nos hizo mucho daño en Marruecos. Nos vimos obligados a tomar medidas para proteger nuestro país. Pero una vez que todo volvió a la normalidad, los periodistas españoles pudieron volver a su tarea con total normalidad. Lo que se espera de la prensa española no es que adopte las tesis marroquíes sino que diga la verdad.

-¿Pero no hubiera sido mejor en aquel momento, ya que como usted dice Marruecos es un país libre, permitir el acceso libre de la prensa al Sáhara?
-Esto ocurrió en un momento de una grave crisis y de reproches a la prensa española. Pero iré más lejos, vimos a algunos periodistas hacer cosas que no tenían que ver con su trabajo, comportándose como activistas políticos que no tienen derecho a ello. Contactando con el Polisario para que organizase manifestaciones provocadas.

-Creo que no me va a decir a quién se está refiriendo…
-No. Pero aparte de esos casos, todos los periodistas que hacen su trabajo son siempre bien acogidos.

-Hablando de periodistas ¿por qué fue detenido Rachid Nini? ¿De qué se le acusa exactamente?
-No quiero hacer un juicio político sobre este tema, que está en manos de la justicia. No quiero ejercer influencia sobre los tribunales, tanto en un sentido como en otro. Nini tiene derecho a un juicio justo y hay que darle la oportunidad de tenerlo.

-Desde el 20 de febrero hasta ahora Marruecos ha vivido protestas continuadas. No llegan a la violencia de otros países árabes, pero los jóvenes se quejan de que no hay cambios a la vista, de que lo anunciado hasta ahora por las autoridades tiene mucho de cosmética…
-Los jóvenes por definición están insatisfechos. Marruecos, después del discurso de su majestad el rey se ha comprometido en un verdadero proceso de reformas. Pero hay que evitar los juicios de intención. Ahora mismo no se puede decir que la próxima constitución será nula y que no aportará nada. Eso nadie lo sabe. Muchos detenidos políticos han sido liberados, se están tomando medidas para resolver los problemas de los diplomados parados, las libertades están garantizadas, las manifestaciones pacíficas son autorizadas. Actualmente somos el único país árabe, y digo bien, el único país árabe donde los manifestantes no se han visto enfrentados con violencia por el Estado. Y eso no son detalles, son elementos muy fundamentales. Más aún, los organizadores de las manifestaciones del 20 febrero son invitados a la TV y a la radio del estado para expresarse libremente. Cuando se habla de la singularidad marroquí, no estamos contando historias sino que es una verdad. Marruecos es actualmente un país acostumbrado a las manifestaciones y también comprometido con las reformas desde hace mucho tiempo. Marruecos no ha esperado al movimiento del 20 de febrero para iniciar las reformas, las inició hace mucho tiempo al empezar el reinado de Mohamed VI. Es por eso que Marruecos gestiona positivamente la Primavera Árabe.

-Quizá sea inconformismo juvenil, pero los integrantes del 20 de Febrero se quejan de cosas que usted me dice que no ocurren. Ellos afirman que en sus protestas son golpeados, que son detenidos, en resumen, que no hay tanta libertad como usted me cuenta. ¿Con qué versión me quedo? Son dos realidades distintas…
-Mire, le pido una cosa: Quédese en Marruecos unos cuantos días y podrá ver si es cierto lo que le digo o es cierto lo que cuentan ellos. Podrá ver en las calles a miles de jóvenes con pancartas en las que se dije "abajo".

-Pero ellos dicen que eso ocurre cuando está presente la prensa extranjera, que somos su salvaguarda.
-No, no es cierto. Marruecos no está comprometido en un proceso de reformas para agradar al extranjero sino para beneficiar a su pueblo, para responder a las necesidades de Marruecos. Y por eso estamos contentos. Es imposible actualmente que un país impida al mundo mirar lo que pasa dentro de sus fronteras.

-¿La Comisión Manuni hará públicos sus resultados en junio, como estaba previsto?
-Lo normal es que sea a mediados de junio.

-¿Y luego habrá un referéndum?
-Pero esa fecha todavía no está fijada. ¿Sabe por qué? Porque queremos ser lo más democráticos posible. Porque una vez que el proyecto de revisión de la Constitución sea presentado en público, habrá otro debate público. Este es el único país en el mundo árabe donde hay un debate público sobre los fundamentos del Estado. Y cada día se habla de esto en los periódicos, la televisión y la radio. Nos gusta ver este debate en la escena pública.

-Sin embargo, no se ha abierto la comisión a la participación de todos los sectores sociales. ¿Por qué?
-No hay un único Movimiento 20 de Febrero. Hay muchos. Y no están de acuerdo entre ellos. Algunos jóvenes del Movimiento sí han sido escuchados en la comisión. Sin embargo, otros protestaron contra eso diciendo que aquellos no son representativos del movimiento. No se puede decir que los jóvenes del 20 de febrero no están implicados en el debate porque hablan, escriben artículos en prensa, aparecen en las televisiones. Tras la entrega del proyecto de la Constitución habrá un segundo debate en el que todos van a participar efectivamente.

-¿Cómo se va a hacer ese debate?
-Todavía no lo sabemos. Todas las formas clásicas de debate serán utilizadas: Habrá también reuniones, foros…

-Pongámonos en el peor de los casos. ¿Qué pasa si la reforma propuesta es rechazada en el referéndum? ¿Temen que la revuelta se torne menos pacífica que hasta ahora?
-Somos un país democrático y todo se ha hecho para dejar al pueblo expresarse libremente. Tanto la Comisión Manuni como el mecanismo político que representa a los partidos, presidido por el consejero de Su Majestad, y el propio el rey se han comprometido en una reforma profunda, son gente razonable que piensa en todo esto y que todo el mundo quiere la reforma. Su Majestad se ha comprometido fuertemente con la reforma. Y la futura Constitución será la de un nuevo Marruecos. Pero dicho esto, debo decir que no somos tontos. Sabemos que hay sectores minoritarios que ya han tomado la decisión de decir NO. Porque su objetivo no es la reforma, tienen otros objetivos. La democracia marroquí les permite tener un lugar en este panorama. Pero el pueblo marroquí está con la reforma y con la estabilidad. Estamos dando pruebas de que reforma y estabilidad no son contradictorias.

-¿Habla de islamistas cuando dice que algunos grupos se opondrán a la nueva Constitución?
-Es una mezcla en la que hay algunos islamistas extremistas. No creen en la democracia, y tienen otros objetivos.

-A quién se refiere? A los yihadistas? Al grupo de Nadia Yasine?
-Son diferentes… La asociación de Nadia Yasin siempre ha estado al margen de las instituciones. Todavía no ha dicho cual va a ser su posición sobre la Constitución. Pero no son los islamistas los que ponen problemas porque son un elemento del espacio político marroquí. Los elementos más importantes son los reformistas y los demócratas, no los islamistas que han perdido mucha influencia. El cliché abierto en Europa sobre que los islamistas son la fuerza más importante en el espacio político marroquí se ha demostrado que está obsoleto. Han intentado captar o encuadrar al movimiento 20 de Febrero estando en la calle pero su fuerza es mucho menor que en años anteriores.

-¿Van a continuar las excarcelaciones de presos después de haber parado tras el atentado?
-El indulto real obedece a unas reglas muy precisas. Pero hay que estar muy seguros de que los que vayan a ser indultados han revisado sus planteamientos ideológicos. Algunos de ellos no nos han facilitado este objetivo. Algunos se han expresado después del atentado de Marrakech desde la cárcel diciendo que el ataque ha sido obra de los servicios secretos marroquíes, lo cual es un escándalo y es una forma de decir que sus amigos no son responsables.

-¿Hay noticias de la investigación sobre el atentado del Argana o de los detenidos?
-La investigación continúa. No le puedo decir más. En todos los países donde hay investigaciones de este tipo se dan los resultados, no el proceso.

-Hasta ahora Marruecos no había padecido demasiados ataques terroristas. ¿Cree que pueden aumentar a partir de ahora?
-No tenemos razones para creer que Marruecos está sistemáticamente amenazado. Pero estamos en una zona desestabilizada por el terrorismo y por tanto tenemos que ser cautos.

-¿Cómo se desarrolla la cooperación antiterrorista con España?¿Está garantizada?
-Es muy correcta. No tenemos ningún problema en particular. Va en buenas condiciones.

Perfil académico y político
Prefiere mantener al margen su vida privada y no habla de a qué dedica su tiempo cuando no está en el despacho de la avenida Allal Al Irfane Al Fassi, sede del Ministerio que dirige desde 2007. «Paso muchas horas aquí, hay días que hasta las 11 de la noche», se disculpa este doctor en Derecho y licenciado en Ciencias Políticas que nació en Casablanca hace 65 años. Miembro del buró político del Partido del Progreso y del Socialismo desde 1995, en 2000 entró a formar parte del Consejo de la Liga Árabe para presidir la Comisión de los Derechos Humanos hasta 2006. Duda, pero enseguida deja claro su vis política, cuando se le pregunta si volvería a dar clases en la Universidad: «Yo mismo he elegido este puesto».