Agudeza visual por José Ignacio LANDALUCE

La labor de los Centros de Reconocimiento de Conductores (CRCs) es apartar de la conducción a los incapacitados por las diferentes causas psicofísicas que señala la normativa y establecer las adaptaciones o condiciones restrictivas mediante las cuales algunos conductores pueden conducir. Como labor añadida, advertir a los automovilistas que presenten patologías que, sin ser causa de denegación o de establecimiento de CR, su tratamiento mejora la calidad de vida de los ciudadanos.
Celebramos la intervención del Fiscal de Seguridad Vial de perseguir, incluso por la vía penal, cuando proceda, a quienes incumplan la normativa y no realicen con el adecuado rigor los reconocimientos. Sin embargo, recibimos con preocupación la reciente variación del cuadro de enfermedades y deficiencias que establece la posibilidad de obtener o prorrogar los permisos C, D, E con una agudeza visual del 0,8 con el ojo mejor y el 0,1 en el ojo peor. Desde Asecemp propugnamos que la agudeza visual del ojo peor sea del 0,3. No obstante, Asecemp, como miembro del Consejo de Seguridad Vial y la asociación más representativa del sector, celebra la actualización de la normativa del Real Decreto 170/2010 que incorpora las nuevas tecnologías a los centros de reconocimiento de conductores y que va a simplificar los trámites a los ciudadanos al conectar estos centros con el registro de conductores e infractores de la Dirección General de Tráfico.

José Ignacio LANDALUCE.
Presidente de la Asociación Española de Centros Médicos-psicotécnicos (Asecemp).