Cataluña

Aguirre augura «muchos años» a Rajoy y coloca a Feijóo como sucesor

Compara a Cataluña como una rama que se desgaja del árbol

Aguirre se sumó ayer a la campaña gallega
Aguirre se sumó ayer a la campaña gallegalarazon

MADRID – La presidenta del PP de Madrid, Esperanza Aguirre, no descarta al presidente de la Xunta y candidato a la reelección este domingo, Alberto Núñez Feijóo, como posible sucesor de Mariano Rajoy, aunque cree que a este último le queda carrera política «para muchos años». En su primera rueda de prensa desde su renuncia a la presidencia de la Comunidad de Madrid, Aguirre destacó que Feijóo es «una figura importantísima» en el PP, y preguntada por si lo ve como sucesor de Rajoy contestó: «¿Por qué no? No lo descarto», como a «muchos otros» también «muy capacitados» dentro del partido.

Antes, aseguró que «todo en esta España de libertades que está en la Constitución puede reclamarse, también el separatismo, ¿por qué no?», aunque precisó que debe hacerse por vías legales y, en este caso, respetando la Carta Magna. En Vigo, donde participó en un acto de apoyo a la candidatura de Feijóo, Aguirre aseguró que no concibe España sin Cataluña y tampoco Cataluña sin España, comparando la situación de esta comunidad, si se separa, como la de una rama que se desgaja del árbol. La presidenta del PP de Madrid incidió en que «Cataluña siempre formó parte de España» y, por tanto, aseguró que su caso no es el de Escocia.

Aguirre pidió el voto para los populares tras acusar a los socialistas de haber «arruinado» al país pese a sus «buenas intenciones» y, frente a ello, elogió la gestión de Feijóo, a quien, recordó, en su día quiso fichar para ser consejero. Pidió el voto para él «por el bien de Galicia y de toda España».

Aguirre, que participó en un almuerzo-mitin ante cerca de 300 personas en Vigo, resumió las «complejas» causas de la crisis de España en que se gastó «más de lo que se podía» Tras indicar que con Feijóo se contuvo el gasto, aludió a los ocho años de Zapatero para explicar que ese Ejecutivo se distinguió por su «torpeza». «Después de la catastrófica experiencia socialista, sólo se me ocurre decir una cosa: "Nunca mais"».