Sevilla

Cortés: «Del Valle estará otra vez en la calle en diez años»

El abogado de Santiago del Valle dijo que podrían recurrir porque no existen pruebas del abuso sexual.

Imagen del 23/02/2011 de Juan José Cortés e Irene Suárez a la salida de la Audiencia Provincial de Huelva
Imagen del 23/02/2011 de Juan José Cortés e Irene Suárez a la salida de la Audiencia Provincial de Huelvalarazon

La familia Cortés lleva tres años luchando contra los elementos en busca de justicia por el asesinato de su hija Mari Luz, de cinco años, el 13 de enero de 2008. Han llamado a muchas puertas, han recorrido todo el país en busca de firmas y apoyos en favor de la cadena perpetua revisable. Todo ha sido inútil. El último varapalo llegó ayer con la sentencia contra los hermanos Del Valle.

La Audiencia Provincial de Huelva condenó a Santiago del Valle a 22 años de prisión –19 por asesinato y tres por abuso sexual con el agravante de reincidencia– y a su hermana, Rosa del Valle, a nueve años de cárcel como cómplice de asesinato. Los tres magistrados del tribunal han prohibido a los condenados residir en Huelva y aproximarse y comunicarse con los familiares de la víctima durante 32 años para Santiago y 19 para Rosa. Además, no podrán acceder al tercer grado hasta cumplir la mitad de la pena. Juan López, abogado de Del Valle, se mostró convencido de que su cliente querrá recurrir la decisión porque considera que no hay pruebas del delito sexual.

Por otro lado, la sentencia acuerda la deducción de testimonio contra la mujer de Santiago, Isabel García, por un presunto delito de falso testimonio durante su declaración el pasado 16 de febrero.

¿Recuperar la normalidad?
Sin embargo, para Juan José Cortés la sentencia no se corresponde con la gravedad de los delitos. El padre de Mari Luz no tenía ganas de hablar, aunque tuvo la deferencia de atender a LA RAZÓN. Su tono de voz reflejaba su decepción y tristeza. «Estoy bloqueado», dijo. Con un tono de voz apagado, confesó que «los sentimientos que tenemos no se pueden explicar con palabras. Intentaremos recuperar la normalidad, pero no va a ser fácil. La decisión judicial no hace justicia, pero no la vamos a recurrir».

A lo largo de la conversación, el dolor dio paso a la indignación: «No se ha hecho justicia. Del Valle estará otra vez en la calle en diez años porque es mentira eso que dicen de que no hay beneficios penitenciarios».

Juan José estaba hundido. Con un tono de voz algo más fuerte recordó que «hasta que no se implante la cadena perpetua no se va a ayudar a seres humanos como mi hija. De esta forma sólo consiguen destruir a la gente. La pena es insignificante en comparación con el daño que hacen».

«Gran parte de la culpa de esta realidad la tienen los políticos», a los que Cortés recurrió en busca de apoyos para implantar la cadena perpetua revisable. Todo fueron buenas palabras y buenos gestos, pero ninguna realidad. En un impulso de rabia cargó contra ellos y afirmó que «lo peor de todo es que los políticos defienden a estas bestias y siguen intentando engañar a los ciudadanos. La legislación actual no beneficia a la sociedad, está desfasada en relación a los tiempos que vivimos».

Cronología de los hechos
La sentencia considera probado que entre las 16:30 y 16:40 horas del 13 de enero de 2008 Mari Luz fue al quiosco de la Avenida de las Flores a comprar chucherías. Cuando regresaba a casa, Santiago del Valle, asomado a la ventana de su vivienda, «con la finalidad de satisfacer su ánimo libidinoso», la atrajo arrojándole a la acera un osito de color blanco.

Mari Luz cogió el osito, entró en el portal, subió las escaleras y el procesado la agarró para evitar que huyera. La niña se resistió y durante el forcejeo sufrió contusiones en el cráneo, tórax, muñeca, rodilla y codo derecho, que la dejaron inconsciente.

El acusado entró en la vivienda, cogió un carrito de la compra, metió a la niña y la tapó con un chaquetón negro. Acto seguido, despertó a su hermana y le contó lo sucedido. Ambos trasladarona la menor al vehículo de Rosa y se dirigieron a la zona de las Marismas, donde Santiago sacó el carrito del maletero y arrojó a la menor al agua, que murió asfixiada por sumersión.

Después del asesinato, Rosa se marchó del lugar en el vehículo y Santiago regresó andando a su domicilio. Llegó con las botas manchadas de barro y sin el carrito, del que se había deshecho durante el camino de vuelta. A continuación, salió a dar una vuelta con su esposa. Ya de vuelta, Rosa les comunicó que los familiares de Mari Luz habían estado allí preguntando por la niña.

De inmediato, cogió sus botas manchadas de barro y las lavó para eliminar cualquier resto orgánico que le implicara en la desaparición de la menor. Conscientes de que el el barrio sospechaba de ellos, a las 5:30 horas del día siguiente Santiago e Isabel se dirigieron a Sevilla, donde permanecieron hasta el día 15 de enero, fecha en la que salieron hacia Granada, donde fueron detenidos, interrogados y puestos en libertad. Después, pasaron por Madrid, Valencia y Pajaroncillo (Cuenca). El 25 de marzo fueron detenidos en Cuenca. El día 7 de marzo, dos trabajadores avistaron a la menor. El cuerpo, sin vida, estaba boca abajo en la desembocadura de los ríos Tinto y Odiel. Eran las 17:30 horas.


«Impulsos sexuales intensos»
- Santiago del Valle padece, según la sentencia, una parafilia del tipo pedofilia con impulsos sexuales intensos y recurrentes, con fantasías o comportamientos sexuales con niñas prepúberes, no sufriendo alteración de sus capacidades intelectuales, cognitivas ni volitivas y es capaz de comprender la ilicitud de sus acciones.
- Rosa del Valle no presenta alteración mental ni psicopatológica que disminuya o merme sus facultades intelectuales y volitivas.



ANÁLISIS; por Jorge UROSA
Es improblable que salga antes de los 15 años de condena
por Jorge UROSA- ¿Cuánto tiempo pasará Del Valle en la cárcel?
–Conforme a los informes periciales del procedimiento el cumplimiento podría ser integro, pues es complicado que la junta de tratamiento ante su pedofilia pudiera informar favorablemente a un tercer grado o libertad condicional, como fase previa a la puesta en libertad. Es muy improbable que el cumplimiento de la condena sea de menos de quince anos.
- ¿La familia Cortés debe recurrir la sentencia?
–Si la defensa recurre la decisión del juez, la posibilidad de que se establezca una condena superior es remota. No cabe la posibilidad de reducción de pena si finalmente la condena se mantiene tras el recurso de casación.
- ¿Cómo ha influido el presunto falso testimonio prestado por la mujer del asesino?
–No ha afectado al fallo, pues se produjo fuera del procedimiento. La posible falsedad de su testimonio y a tenor del fallo ha sido contrarrestada en una valoración conjunta del resto de las pruebas practicadas.


Jorge Urosa es Profesor de Historia del Derecho de la Universidad Rey Juan Carlos