Cosa de locos

Me gustaría saber cómo cambia realmente el mundo visto a 110 km por hora en vez de 120 y sobre todo conocer el verdadero motivo que pone al Gobierno a cambiarlo, así, a bote pronto, que es como hace casi todas las cosas, por otra parte. Los bien pensados aseguran que Zapatero y sus boys quieren que haya menor consumo de petróleo, menos contaminación y menos accidentes… Pero los mal pensados, entre los que me encuentro, le vemos al asunto un cariz recaudatorio y sospechamos además, porque ya se está contando por ahí, que si el Gobierno necesita que todos ahorremos combustible es porque él se ha olvidado de hacer los deberes y no cuenta con las reservas oportunas.
Sea para bien o para mal, como a los socialistas de este tiempo se les meta algo en la cabeza ya nos podemos dar por… fastidiados. Porque más difícil parecía que cayera la «montaña» del tabaco y sin embargo, ya se ha visto que España ha puesto en todos sus rincones el cartel de «no fumarás…». Lo curioso de ambas prohibiciones, es que ambas sufren del espíritu de la contradicción que reina desde hace dos legislaturas en nuestro país. A saber: No se fuma, pero hay aún más puntos de venta que antes de la prohibición en los que se puede adquirir el tabaco…. Y se baja la velocidad diez kilómetros a la hora, pero los coches que están a la venta en el mercado cada vez son más rápidos. Si fueramos Asterix u Obelix diríamos aquello de «están locos estos romanos».