Suiza

Regalo de papá

La Razón
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Éste sería resumido el titular de la portada de «Hola», que le dedica catorce paginas interiores a Blanca y Borja Thyssen. Con mucha habilidad, han aprovechado los dimes y diretes del vídeo que presúntamente recogía ciertas actividades de Blanca, que podría calificarse de 4R, gravemente peligrosas, que se ponía como calificación moral en las películas de alto contenido erótico. Lo dicho, exclusiva de tronío que seguramente habrá valido más de 100.000 euros€que les vienen estupendamente. Porque habrá que reconocer que con la asignación anual que tiene la juvenil pareja, un millón de dólares, no se puede llegar a final de mes y necesitan otros ingresos para tener una vida modesta pero razonable. Aprovechan la ocasión para enseñarnos una casa rústica que poseen en una de las mejores zonas de Suiza. No crean sin mayor importancia: 240 metros construidos, en una parcela de 40.000 metros cuadrados. Dice Borja que fue un regalo del barón cuando cumplió 18 años. Fácil de entender que la baronesa se ponga como dice mi amigo Naranjo, completamente «rejervia». Las ganas de incordiar del niño. Podría haber dicho regalo de mis padres. No, el mérito para el Barón. Ya sabemos como son estas cosas, la de veces que Tita le diría a su esposo: «Heini regálale al niño algo especial al cumplir la mayoría de edad». Insistiría, insistiría, seguro que incluso renunció a alguna nueva joya. Todo para que el ingrato hijo tuviese la referida propiedad. Para rematar, el mozo, al que le ha ido por lo visto muy mal en la vida (es la imagen del parado, claro está, súper VIP), dice que ojalá hubiese tenido otra educación. Supongo que lo dirá por haber podido disfrutar de una vida más cómoda.