Irlanda

Shakespeare tiene mucho duende

A claremos algo: la cosa no va de flamencos, sino de los otros duendes. Los de verdad (bueno, ya saben). Esos seres que pueblan los bosques de Irlanda y Escocia, las leyendas asturianas y algún que otro clásico del teatro. como «El sueño de una noche de verano». Shakespeare imaginó a Titania, Oberón, Puck y compañía. Y luego la modernidad los relegó a una existencia de entidades metafóricas.

Shakespeare tiene mucho duende
Shakespeare tiene mucho duendelarazon

Pero hay una compañía en España que, desde hace 25 años, defiende una concepción de la escena orgánica y mágica, repleta de influencias «faéricas» y celtas, un universo en el que las hadas tienen finas alas de mariposa y los demonios cuernos de cabra. Se llama Morboria Teatro y llega, dentro de Los Veranos de la Villa, al Teatro Alcázar de Madrid con esta revisión de una produción que ya estrenó en 1998 y que casi no ha cambiado.Decir Morboria es hablar del matrimonio formado por Eva del Palacio y Fernando Aguado. O, más bien, de los Del Palacio y los Aguado, pues sus hermanos también alimentan las filas de esta compañía familiar en la que todos se reparten desde la confección de los trajes y el atrezzo hasta la interpretación. Así, Eva del Palacio es la autora de la versión y directora, además de dar vida a Hipólita y Titania, y su marido se enfunda la capa del rey de la noche, Oberón, pero también los ropajes del duque Teseo y de los cómicos Colas Canilla y Píramo, secundado por Álvaro Aguado, que es Puck. Ambos hermanos crean las máscaras. Por su parte, Ana del Palacio firma el atrezzo y la escenografía.Dejar volar la imaginación«Este montaje es una fiesta en todos los sentidos: Shakespeare propone tres mundos muy diferentes entre sí, y nosotros los tratamos cada uno de una manera: para el de los enamorados hemos buscado una estética naturalista, aunque tratado como si fuera un cuento; en cuanto a los artesanos, lo hemos llevado a la comedia dell'arte. Por último, en el mundo "faérico"o élfico, el de las hadas y los duendes, hemos dejado volar nuestra imaginación». Y reconoce la directora que «la pasión por la estética es nuestra seña de identidad».La compañía, que no sólo se dedica a hadas y faunos, ha llevado a escena clásicos como «El burgués gentilhombre» y «El avaro». Pero, en general, busca en sus propuestas epatar visualmente, con un derroche de maquillaje y atrezzo que, reconoce la creadora «es caro, no es un montaje para tiempos de crisis, pero me sigo negando, de momento, a montar a Shakespeare con dos o tres actores». Además, cuenta, «me gusta la época, la historia, los trajes del momento». Hay otra dificultad: la caracterización es compleja y lleva su tiempo, y los novatos lo notan: «Llevamos ya 25 años experimentando y nos conocemos bien, pero cuando incorporo a actores nuevos, a menudo les entra la "crisis del maquillaje". Yo les digo: "¿Tú donde te crees que estás? ¡Estás en Morboria!"».Hecho a manoDetrás de cada función hay un trabajo intenso. «Todo está hecho a mano en nuestro taller con mucha paciencia», explica Fernando Aguado. «La caracterización de los personajes la hacemos entre mi hermano y yo. Luego todo se complementa con pelucas, atrezzo natural, etc...». En ese proceso, explica, pasan de bocetos a moldes, primero en arcilla, luego en plastilina y finalmente en látex. Después llega el momento de pintar las máscaras y añadirles complementos, como el pelo, que hacen con elementos naturales. «Vivimos en Batán, cerca de la Casa de Campo, y estamos todo el día allí, paseando, a la caza de nuevos materiales. Es una obsesión. Tengo el taller atestado de ramas y cortezas». Por eso, bromea, «Los personajes están medio vivos con materiales como el musgo, que cambian de color según les da la luz».El universo de Morboria tiene referentes confesos de lo más variado, todos anclados en la cultura popular contemporánea: desde los cómics de Moebius a los de Richard Corben; del cine de serie B a la fantasía de «Legend», «Cristal oscuro» y «Dentro del laberinto»; del humor absurdo de los Monty Python al de Mortadelo y Filemón; de las viñetas de «La casta de lo Metabarones» de Jodorowsky y Giménez, a las mitología de tierras lejanas de las novelas de «El señor de los anillos». Aunque, aclara Aguado, «nosotros ya hacíamos orcos, elfos y otros bicharracos antes de saber siquiera que había un señor llamado Tolkien». La novela gótica y las historias de zombies se cuelan entre las pasiones de estos «frikis» ilustrados que, adelanta Aguado, preparan ahora un espectáculo de «danza-zombie».Pero, de regreso a Shakespeare, y por si alguien se ha asustado con lo leído, Eva del Palacio tranquiliza: no todo es máscara de látex en Morboria. El texto está, y lo han respetado, sirviéndose de hasta cuatro diferentes traducciones. «Es una adaptación muy cuidadosa», asegura la directora. Lo dice Aguado: «Este espectáculo es nuestra bandera, se ve todo nuestro estilo, desde la estética hasta el ritmo, el texto y el humor».Hamlet de risaEvaristo Calvo y Víctor Mosqueira se hacen llamar Mofa&Befa (o, lo que es lo mismo, la compañía gallega Producións Teatrais Excentricas), y eso ya dice mucho. Si se le añade el título de «Shakespeare para ignorantes» y se echa un vistazo a la fotografía, queda claro que este montaje del bardo inglés no va en serio. Una galería de personajes cómicos los llevarán por textos procedentes de «Macbeth», «Ricardo III», «El Rey Lear», «Hamlet», «Julio Cesar», «Romeo y Julieta», «Otelo», «Como gustéis», «Cimbelino» y «Medida por Medida». Esta lección sobre el género humano en su vertiente más cómica estará del 14 al 24 de julio en el Teatro de Madrid.