Una previsión inicial de 7000 asistentes para la macrofiesta

Madrid- Dentro de los pasos previos para obtener los permisos de apertura de la fiesta de Halloween que se celebró en el Madrid Arena, el empresario Miguel Ángel Flores, adminstrador único de la sociedad Diviertt S. L., se dirigió a Madrid Espacios y Congresos –la entidad de titularidad municipal propietaria del recinto– con una estimación del volumen que tendría la fiesta. La notificación, obligatoria en este tipo de eventos y que posteriormente Madrid Espacios y Congresos reenvía tanto a Policía Nacional como a la Municipal, recoge datos como el número estimado de asistentes o los efectivos de seguridad que requerirá el acto. En este caso, y según el citado documento al que ha tenido acceso LA RAZÓN, Diviertt informó al Ayuntamiento de Madrid de que «7.000 personas aproximadamente» acudirían al Thriller Music Park. Posteriormente, sin embargo, vendió al menos 2.500 entradas más. En la misma circular se detallaba que el evento contaría con los servicios de 38 guardias jurados de la empresa Seguriber en el exterior del pabellón y con 75 personas más, contratadas a la sociedad Kontrol 34 S. L., para «labores auxiliares», como roperos, control de entradas y para dar información a los asistentes en el interior del recinto.