El otro Madrid-Barça

Una tiene el «waka waka». La otra, una telegenia que hipnotiza. Mientras la primera llena estadios, la segunda comenta la jugada. Diferencias hay muchas, pero parecidos sólo uno: son dos mujeres de éxito que comparten su vida con dos campeones del mundo. Mientras Iker Casillas protege la meta merengue y Gerard Piqué escuda la defensa azulgrana, Sara Carbonero y Shakira disputan su propio derbi fuera del campo. Un duelo de belleza digno de las películas del Oeste. La de Barranquilla marca goles con sus caderas y la española derrite porterías con la mirada. Se contraponen un par de estilos de mujer muy diferentes: el exotismo de la cantante frente al atractivo de la periodista.

Con sus romances, han hecho correr ríos de tinta en las páginas del papel «couché» y dejado al descubierto la cara más romántica de los futbolistas. Eso sí, si el clásico se ganase por los momentos mediáticos de estas parejas, la balanza se inclinaría a favor de Casillas y Carbonero: en la memoria de los espectadores todavía permanece el apasionado beso que el portero le plantó delante de las cámaras tras la final del Mundial de Suráfrica. Y aunque Piqué y Shakira han sido más rezagados en sus demostraciones afectivas, durante las últimas semanas ya han hecho público su amor y, desde su Twitter, la colombiana ha intentado salvar la distancia con su novio. No sólo subió una foto suya junto al defensa azulgrana (en la que lo definía como «mi sol»), también hace unos días escribió: «Que viva el Barça y que viva el 3», en referencia al número de Piqué. Además, estos días la pareja se ha dejado ver muy acaramelada por Barcelona, ya que la cantante ha puesto fin a su gira lationamericana y pasará unos días en la Ciudad Condal antes de retomar sus actuaciones por Europa.

Mamá, quiero ser una «wag»
Parece que las dulces princesas Disney se han quedado obsoletas y ahora las adolescentes sueñan con ser una «wag» (término con el que se identifica a las espectaculares novias de los futbolistas). Razón no les falta si se observa con detalle el resto de la alineación femenina: con la camiseta blanca, toma la delantera la espectacular Irina Shayk, novia de Cristiano Ronaldo, seguida de la modelo Aida Yéspica, pareja de Özil. Con la malla azulgrana despuntan Antonella Roccuzzo y Malena Costa, las compañeras de Messi y Carles Pujol, respectivamente. En el banquillo, aunque no por falta de atributos, se quedan Carlota Ruiz (la esposa de Arbeloa), Nagore Aramburu (Xabi Alonso) y Caroline Célico (Kaká) en las filas madridistas y en las blaugranas, Patricia González (David Villa) o Anna Ortiz, que acaba de tener una hija junto a Andrés Iniesta.

Eso sí, al igual que los futbolistas, unas son más discretas que otras y no todas acaparan la atención de los medios como lo hace la novia de CR7, que hace unos días mostró sus encantos por una causa solidaria. El caso es que, sin árbitros que piten el final del partido, parece que este clásico entre mujeres puede poner algo más de emoción a los tres partidos Madrid-Barça que aún quedan en el calendario.

AMOR EN EL CÉSPED
- La relación entre el defensa azulgrana y la cantante colombiana es más reciente y comenzó durante la grabación del videoclip para el tema «Waka-waka». Sin embargo, el portero del Real Madrid coincidió con Carbonero durante el Torneo de la Copa Confederaciones en 2009 y, durante varios meses, los rumores se desataron.
- Son muchos los que se empeñan en elegir a la pareja favorita ahora que ambas relaciones están consolidadas. ¿Fue mejor el beso entre Casillas y Carbonero durante el Mundial o el de Piqué y Shakira en la portada de la revista «Caras»?