Manhattan

La camarera está «en estado de shock»

La mujer que este fin de semana ha denunciado al director gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Dominique Strauss-Kahn, por intentar violarla en la suite de un hotel de Nueva York trabajaba en el alojamiento desde hace tres años y no había habido quejas de ella, según informa este lunes el diario 'New York Post'.

El diario, que dice conocer la identidad de la demandante pero no ha querido revelarla, señala que es una mujer procedente de Africa de 32 años, residente en el Bronx, casada y madre de una chica de 16 años. Según sus compañeros de trabajo y conocidos, es una trabajadora incansable.
"Es una buena persona, muy agradable y muy simpática. Está en estado de 'shock'", ha explicado una empleada del hotel Sofitel. El establecimiento emitió ayer un comunicado en el que indicó que la mujer trabajaba allí desde hace tres años y que su trabajo ha sido en este tiempo "satisfactorio".


La demandante, que consiguió zafarse de Strauss-Kahn después de que éste abusara de ella sexualmente e intentara violarla el sábado por la noche en la suite que ocupaba en el hotel y le denunció inmediatamente a la Policía, ha identificado al director del FMI en una rueda de reconocimiento realizada ayer, según fuentes policiales citadas por el rotativo.


Por otra parte, el 'New York Post' señala que ayer se había barajado la posibilidad de que Strauss-Kahn pudiera ser puesto en libertad bajo fianza de 250.000 dólares, pero el fiscal jefe del distrito de Manhattan, Cyrus Vance, rechazó finalmente esta opción. Según las fuentes consultadas por el diario, Vance está barajando fijar una fianza de hasta 2 millones de dólares, además de imponer a Strauss-Kahn que tenga que llevar un brazalete electrónico. Asimismo, se le ha retirado su pasaporte. "La preocupación de la oficina del fiscal de distrito es que no hay un tratado de extradición con Francia y se teme que pueda convertirse en un Polanski", ha explicado la fuente al rotativo, en referencia al cineasta Roman Polanski, quien tras ser implicado en un caso de violación de una menor en 1977 se trasladó a Francia, donde permaneció durante más de 30 años sin ser arrestado.