Portugal

Portugal encaja el rescate de Irlanda en vísperas de una huelga general

El Gobierno luso se afana en desmarcarse de Irlanda y reitera que no necesita ayuda para superar la especulación.

El primer ministro portugués, el socialista José Sócrates, y el presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, en una imagen de archivo
El primer ministro portugués, el socialista José Sócrates, y el presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, en una imagen de archivolarazon

Un día después de que la UE diese «luz verde» al rescate de Irlanda, el Gobierno portugués trató de desmarcarse de la difícil situación que atraviesa el «tigre celta» y subrayó la buena salud de su sistema bancario, además de expresar su solidaridad con Irlanda, en vísperas de la huelga general que sacudirá mañana Portugal.

Por la estabilidad del euro
El primer ministro, José Sócrates, salió en defensa de la economía lusa y pronosticó que superará la crisis sin necesidad de ayuda y se refirió al auxilio a Irlanda como clave para la estabilidad del euro. Pese a las declaraciones de Sócrates en las que afirmaba que el rescate «calmará» los mercados y frenará la especulación «sin sentido» que padece, Portugal volvió a sufrir, una vez más, el castigo de los mercados.

El riesgo país de Portugal se elevó ayer hasta los 414 puntos básicos, con lo que el coste de la deuda soberana lusa está ya en el 6,79% en el caso de los bonos a diez años, si bien todavía no llega al 7,4% que llegó a alcanzar este mes. Consciente de que podría ser la siguiente en la lista, Portugal se esforzó ayer en alejar las dudas que sobrevuelan su economía y recalcó sus planes para reducir el déficit y sanear las cuentas, además de las reformas estructurales con las que tratará de reforzar tanto su competitividad como su potencial tecnológico.

El primer ministro recordó que su sistema financiero fue uno de los que menos sufrió por la crisis de los dos últimos años, sin la exposición a la burbuja inmobiliaria y con una situación presupuestaria mucho mejor que la irlandesa. Portugal, que cerró 2009 con un déficit del 9,3%, disminuirá este año la tasa en dos puntos porcentuales y espera reducirlo al 4,6% en el año 2011, por debajo de la media europea. El ministro de Finanzas luso, Fernando Teixeira, destacó en la misma línea la importancia del rescate a Dublín para evitar el «efecto contagio» y defendió a la banca de su país.

Portugal afronta las dudas sobre su economía con la vista puesta en la huelga general de mañana. Por primera vez en 22 años, los dos grandes sindicatos nacionales, la Confederación General de Trabajadores Portugueses y la Unión General de Trabajadores, se han unido en una convocatoria que tratará de paralizar el país. En cinco años de gobierno, Sócrates ha sufrido numerosas huelgas y manifestaciones contra sus reformas y recortes al sector público. El paro, apoyado por los sindicatos españoles, podría coincidir con una reunión de los ministros de Finanzas de la UE, en la que la atención estará focalizada en la delicada situación de Portugal.