Una sola copa de vino y frutos secos para los festejos del Ejército del Aire

Madrid- Las celebraciones lo son menos en el Ejército del Aire desde que se recibiera una nueva orden al respecto a primeros del pasado mes de mayo. Era costumbre inmemorial que la despedida de algún militar –por cambio de destino o pase a la reserva– o el festejo por una condecoración concedida se cerrara junto a sus compañeros con el tradicional vino español, acompañado de un ágape más o menos generoso, pero en el que no faltaban el no menos emblemático jamón y otros clásicos aperitivos. Pero el Cuartel General del Aire envió en la mencionada fecha una instrucción donde especificaba que, desde ese momento, el vino de estas celebraciones debe ajustarse a una sola copa de vino por persona y, como acompañamiento, únicamente se permiten los frutos secos, aunque de «una sola variedad». Los recortes presupuestarios que padecen tanto el Ministerio de Defensa como los ejércitos no afectan a los vuelos de miembros del Ejecutivo ni a las altas esferas, pero sí a las celebraciones más habituales entre los militares, que serán más discretas a partir de ahora.