Crisis del PSOE

Rajoy alaba la «grandeza» de Camps ante una «difícil decisión»

El líder del PP cierra filas en su primera intervención tras la dimisión y emplaza a los socialistas a tomar ejemplo 

Rajoy, durante su reunión con Hillary Clinton
Rajoy, durante su reunión con Hillary Clintonlarazon

MADRID- En Andalucía, el último gran bastión socialista que el PP tiene pendiente conquistar, Mariano Rajoy rompió ayer finalmente su silencio sobre Francisco Camps, el ya ex presidente de la Generalitat Valenciana. Dos días después de su dimisión, Rajoy se pronunció en público sobre todo lo ocurrido, pero sin grandes novedades en sus argumentos respecto al comunicado oficial que emitió el mismo día de autos.

La estrategia de la dirección popular para rentabilizar al máximo ese «sacrificio» de Camps está perfectamente definida: presentarle como un mártir ejemplar y esperar hasta que la Justicia se pronuncie y volver contra el PSOE la que ha sido una de sus principales armas para intentar desgastar a los populares.

Basta, por ejemplo, con repasar las intervenciones de los miembros del Gobierno en alguna de las últimas sesiones de control en el Congreso de los Diputados para confirmar cómo el «caso Gürtel» y el nombre de Francisco Camps eran una constante en el verbo del responsable ministerial que fuera, y fuera la que fuera la pregunta que se le formulaba. «A ver qué hacen a partir de ahora, porque la gallina de los huevos de oro ya se les ha muerto», ironizaba ayer tarde un veterano dirigente del PP.

Rajoy alabó la «grandeza» de Camps y su saber estar «a la altura de las circunstancias» al tomar «esa difícil decisión por su tierra y por su partido», comentó, haciéndose eco de los argumentos que esgrimió el político valenciano cuando oficializó su dimisión por la «causa de los trajes». Y es que, Rajoy aseguró que «es en los momentos difíciles donde hay que dar la talla, donde se conoce a un político y a la gente con grandeza», argumentó para añador que «para las cosas fáciles vale cualquiera».

En ese cierre de filas, el líder de los populares le mostró también su apoyo incondicional al no dar por concluida su carrera política. «Desde luego, después de lo que ha pasado, tiene futuro, donde quiera, en la vida pública y privada», comentó.

Exigencias al PSOE

Además de arropar a Camps, Rajoy también aprovechó su primer pronunciamiento al respecto para exigirle al PSOE que tome ejemplo y para echarle en cara, como ya vienen haciendo otros dirigentes del PP, el «caso Faisán» o el «escándalo» de los Expedientes de Regulación de Empleo en Andalucía.

Desde el Gobierno, su portavoz, José Blanco, exigió ayer explicaciones a quienes dentro del PP pidieron al ex presidente de la Generalitat que fuera a un juzgado y se declarara culpable. «Tendrían argumentos para saber que era culpable», manifestó, informa Efe.