La mafia china del Eixample explotó a un centenar de mujeres

Barcelona- La red de proxenetismo chino de la zona del Eixample de Barcelona se ha saldado con un balance final de 39 detenidos, que tenían sometidas a un centenar de mujeres. Los Mossos d'Esquadra explicaron ayer que entre los arrestados está el jefe de la banda y que 33 de ellos ya han ingresado en la cárcel por orden judicial.

El inspector jefe del área central de crimen organizado de los Mossos, Quim Francès, explicó que la red de proxenetas forzaba a estas mujeres a prostituirse bajo unas condiciones infrahumanas, con más de ocho horas de trabajo diarios sin ningún tipo de higiene. Además, las chicas eran obligadas a tomar drogas como la ketamina.

Más delitos
En total, se han desmantelado quince prostíbulos en la zona de Gran Vía y las calles Entença y Calàbria. Según la Policía Autonómica, la red había ampliado sus actividades y además del tráfico de seres humanos se dedicaba a la venta de drogas y a la falsificación de documentos y de tarjetas de crédito.

El método de captación de la red era idéntico al de las mafias de la Europa del Este. Engañaban a las mujeres en China, con falsas promesas de trabajo, y una vez en Barcelona les obligaban a pagar una deuda de 200.000 euros, que jamás era saldada, por mucho que trabajasen. Se aprovechaban de su condición de desarraigo y solitud en Barcelona.

La parte más escabrosa de la trama llegó cuando una de las mujeres se quitó la vida al saber que había contraído el sida en una de sus relaciones. En los registros realizados a estos prostíbulos clandestinos, los Mossos hallaron sustancias abortivas, procedentes de China. Las jóvenes eran obligadas a tomar estas pastillas, además de la citada ketamina.

Esta red forzaba a prostituirse a más de cien mujeres, pero en el momento de la redada la Policía Autonómica encontró a unas 30 chicas en los pisos, contra los que no se ha iniciado de momento ningún proceso de expulsión.