Cerco a la corrupción

Lula da Silva descarta presentarse a las próximas elecciones

El presidente saliente de Brasil habló, y lo hizo para ceder la corona a su princesa, Dilma Rousseff. Lula da Silva recibió ayer a la presidenta electa y descartó de plano volver a postularse para el cargo en los comicios de 2014, pues considera que «a rey muerto, rey puesto».

La Razón
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En una rueda de prensa junto a Rousseff en el Palacio presidencial de Planalto, Lula aseguró que se dan todas las condiciones para que la futura presidenta goce de cuatro años de éxitos en el Gobierno y para que en las próximas presidenciales aspire con «toda legitimidad» a un nuevo mandato.

Según Lula, después de llegar al final de su mandato con una aprobación personal y política como la que tiene, (que ronda el 80%), pensar en volver sería «una temeridad», porque la expectativa será infinitamente mayor. «Daré una lección de cómo se debe comportar un ex presidente», apuntó en relación a conjeturas sobre su posible influencia en la gestión que Rousseff comenzará el próximo 1 de enero, y al mismo tiempo negó que pueda ejercer alguna presión en el nombramiento de quienes serán sus ministros.

«El Gobierno de Dilma tiene que tener la cara de Dilma», afirmó el mandatario sobre su heredera política en su primera declaración pública desde las elecciones. «Un ex presidente no indica, no veta. Sólo puede dar un consejo, pero siempre y cuando se lo pidan», aclaró.

Asimismo, el presidente saliente aseguró que Rousseff recibirá un Gobierno que comparó con un automóvil en marcha, «con el motor regulado y a 120 kilómetros por hora», pero apuntó que ella podrá «pisar más el acelerador», con el cuidado de «no pasarse un semáforo en rojo», porque «en economía no hay magia y nadie puede sacar un conejo de la chistera».