La ex directora de la Fundació Puigvert defiende las facturas a Salud

Barcelona- La ex directora de la Fundació Puigvert y actual presidenta de su patronato, Esperanza Martí, defendió ayer ante el tribunal la legalidad de las facturas cargadas al Servicio Catalán de la Salud por 237 tratamientos de litroticias que la Fiscalía cree que se practicaron inútilmente. En la sección quinta de la Audiencia de Barcelona arrancó ayer el juicio contra Esperanza Martí, el ex director del servicio de Radiodiagnóstico de la Fundació Puigvert, Fernando Izquierdo, y la ex directora del Área de Servicios Básicos, Helena Isàbal, acusados de haber desviado 356.099 euros a través de 237 litotricias inútiles.

La Fiscalía pide cuatro años de prisión para cada uno de los acusados por la supuesta estafa al CatSalut, destapada a raíz de una denuncia que presentó ante la Generalitat la familia Puigvert, enzarzada en una pugna con la presidencia de la Fundación.

El ministerio público mantiene que la clínica, que tenía firmado un convenio con Salud para el tratamiento de personas procedentes de la sanidad pública, facturó indebidamente entre 2003 y 2004 un total de 237 litotricias que resultaban inútiles, ya que los pacientes habían expulsado ya la piedra de forma espontánea.A esos pacientes, según la Fiscalía, se les administraba el tratamiento de ondas de choque extracorpóreas indicado para la eliminación de los cálculos, pero a intensidad mínima y por un espacio de tiempo totalmente insuficiente.

El que fuera director de Radiología del centro explicó que esos tratamientos se practicaban para eliminar los residuos.