Andalucía

La Región abre la RM-621 y la RM-C-20 pero siguen cortadas otras tres carreteras

Fomento declarará obra de emergencia la reconstrucción de la autovía A-7

El consejero de Obras Públicas y Ordenación del Territorio, Antonio Sevilla
El consejero de Obras Públicas y Ordenación del Territorio, Antonio Sevillalarazon

MURCIA- La Consejería de Obras Públicas y Ordenación del Territorio abrió ayer al tráfico las carreteras RM-621, que discurre entre Lorca y Purias, y la RM-C-20, que va de Mula al Camino del Curtis, por lo que ya son nueve las carreteras de la red autonómica que han podido ser abiertas desde el pasado sábado, gracias a los trabajos de limpieza de arrastres de tierra llevados a cabo por el Servicio de Conservación de Carreteras.
Las carreteras de tercer nivel D-10 (La Almenara-Lorca), D-12 (Lorca a Estación de Puerto Lumbreras) y la RM-517 (entre Cehegín y Caravaca de la Cruz) continúan cortadas porque sus daños son mayores y requieren de una reparación más importante que una mera limpieza de arrastres de tierra. Los equipos del Servicio de Conservación de Carreteras de la Consejería están apoyando a los municipios afectados con el fin de que puedan despejar sus caminos rurales y facilitar la movilidad de los ciudadanos.

A-7, obra de emergencia
Por otro lado, el Ministerio de Fomento declarará obra de emergencia la reconstrucción del puente de la autovía de A-7 que une las localidades murcianas de Lorca y Puerto Lumbreras y que se vino abajo el pasado viernes a causa del temporal que ha azotado con fuerza el sureste de la península.

Durante la presentación del proyecto de ley de presupuestos para el departamento, la ministra de Fomento, Ana Pastor, anunció que en unas semanas podría determinarse cuando estará de nuevo en funcionamiento la infraestructura, de 30 años de antigüedad. Asimismo, indicó que las máquinas están trabajando desde el primer momento en el desescombro y que la prueba de carga que se ha practicado en el puente ha sido favorable. En este momento, añadió, los técnicos están trabajando y realizando los estudios correspondientes ya que el puente es la conectividad entre Andalucía y Murcia y al caerse hay solo una carretera municipal estrecha que comunica ambas regiones. De hecho, tras vencer los pilares de la infraestructura se han realizado trabajos de demolición de los tableros caídos y se ha construido una escollera hormigonada para dar estabilidad a la zona dañada, aunque, poco después, esta vía también tuvo que ser cerrada al hundirse otro puente.