Agüero: «El día que me quiera ir me iré»

Hace tiempo ésas eran las respuestas de Agüero cuando se le preguntaba si se atrevería a jugar alguna vez en el Real Madrid. Ayer, en cambio, aguantó unos instantes en silencio. Y dijo después: «El día que yo me quiera ir, me voy a ir. Ahora estoy muy feliz acá y, para que quede claro, el día que yo me quiera ir diré la verdad, me quiero ir y me quiero ir».

No importaba ya que el «Kun» haya ampliado su contrato hasta el 30 de junio de 2014. Dos años más como rojiblanco. Ni su empeño en demostrar su fidelidad al club. «Estoy muy feliz. La renovación no es sólo una firma, sino también un compromiso para ayudar al club a ir adelante. Todos juntos, con el club y el equipo, vamos a sacar esto adelante. Estoy contento y feliz por seguir en el club y espero continuar muchos años más», comentó.

Poco importaba también que Enrique Cerezo insistiera en asegurar la continuidad del «10» en el Atlético. «Le quedaban once meses para finalizar contrato y podía haber firmado con cualquiera y no por 45 ni por 20. Si se quería marchar, sólo tenía que esperar a que terminara su contrato y marcharse. Sin embargo, ha sido generoso, quiere seguir aquí y por eso ha firmado», explicó el presidente rojiblanco, muy molesto por cada pregunta relacionada con la rebaja de la cláusula de rescisión del «Kun». Agüero cuesta ahora 45 millones, 15 menos que antes de renovar. «Él quiere jugar en el Atlético de Madrid. No es que haya que bajar la cláusula para sacar un precio mejor a un club. Se le rebaja la cláusula porque era mejor renovarle con una cláusula de 45 que dejarle ir libre a los once meses», dijo el presidente. «Os van a mandar esta tarde un CD con la conferencia de prensa para que os quede claro», añadió.

Cerezo está enfadado por las últimas decisiones tomadas por Miguel Ángel Gil. Le molestó la marcha de Simão sin que se le consultara. Al portugués lo aprecia personal y deportivamente. Y le ha vuelto a molestar que Miguel Ángel Gil anunciara la oferta recibida por el Madrid antes de que él la conociera. Un anuncio que prepara la despedida. Una manera de suavizar su salida a cualquier club que no sea el Real Madrid. O de presentar como imparable su traspaso al máximo rival. «Los jugadores juegan donde quieren», afirma siempre Cerezo. Y Agüero quiere jugar en el Atlético. De momento.


«Perdonad, me está llamando Florentino»
Enrique Cerezo se mueve entre el enfado y el humor cuando se comenta la posible marcha de Agüero al Real Madrid. «Perdonad, me llama Florentino», dijo cuando le sonó el móvil en medio de la conferencia de prensa. «No era Florentino», aclaró después. Pero la sombra del Madrid sigue encima del «Kun». El argentino, mientras, intenta mentalizar a sus compañeros para afrontar el encuentro del próximo sábado contra el Barcelona. «El que no crea que podemos ganar que no viaje. Tenemos posibilidades, no son invencibles», dijo.