Buenos Aires

Muere el «monstruo de Mendoza» que tuvo siete niños con una de sus hijas

Fue apresado en mayo del 2009 después de que su hija Paola, de 36 años, denunciase que había sido sometida a abusos desde los 15 años bajo amenazas de muerte, y que tuvo siete hijos incestuosos.

Armando Lucero, conocido como el "monstruo de Mendoza"por haber tenido siete niños con una de sus hijas, que le denunció por haber abusado sexualmente de ella durante dos décadas, murió hoy en Argentina por una afección respiratoria, informaron fuentes penitenciarias.Lucero, de 68 años, estaba preso desde hace un año en la penitenciaria de la ciudad de Mendoza, mil kilómetros al oeste de Buenos Aires, procesado por abuso sexual con acceso carnal agravado por el vínculo.El detenido, que estaba a la espera del inicio del juicio en su contra, falleció en el Hospital Central de Mendoza, donde permanecía internado por segunda vez con una "grave descompensación respiratoria", informó la dirección del servicio penitenciario en el que permanecía"El monstruo de Mendoza"fue apresado en mayo del 2009 después de que su hija Paola, de 36 años, denunciase que había sido sometida a abusos desde los 15 años bajo amenazas de muerte, y que tuvo siete hijos incestuosos, que actualmente tienen entre 3 y 20 años.La paternidad fue confirmada por estudios genéticos difundidos el pasado año por la justicia provincial.El fallecido estaba también acusado de violar a otra de sus hijas, quien denunció que abusó de ella cuando tenía 8 años y que la manoseó "durante mucho tiempo".Lucero tenía un total de 21 hijos, ocho con su primera esposa, otros seis con su segunda pareja y siete con su hija Paola, que decidió finalmente denunciar a su padre porque temía que también violara a una de las niñas de ambos, aseguró.Era apodado "el monstruo de Mendoza"por la similitud con el caso del austríaco Josef Fritzl, "el monstruo de Amstetten", condenado a prisión perpetua por el asesinato de uno de los siete hijos que tuvo con su hija Elizabeth, a quien secuestró y violó en el sótano de su casa durante años.