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A pesar de la crisis crecen a nivel mundial los donativos para Ayuda a la Iglesia Necesitada
La asociación católica internacional Ayuda a la Iglesia Necesitada (AIN) recibió en 2008 más de 82 millones de euros, un récord en donativos, a pesar de la crisis. «Los donativos procedentes de 18 países de Europa, América del Norte y del Sur y de Australia, se han incrementado en casi un 3 por ciento frente al ejercicio anterior», explica la organización, que el año pasado subvencionó 5.020 proyectos en 137 países. De ellos, 1.059 proyectos eran ayudas a la construcción o renovación de iglesias, conventos, seminarios y centros parroquiales en países del Tercer Mundo o en condiciones precarias. Además, AIN apoyó la formación y manutención de 14.739 seminaristas, es decir, casi uno de cada ocho futuros sacerdotes de todo el mundo. Por otra parte, en 2008, AIN distribuyó más de un millón de Biblias del Niño y 365.000 ejemplares del Pequeño Catecismo, que se usa en familias de muchos países. En lugares donde sacerdotes, religiosas y catequistas deben recorrer grandes distancias para atender a los fieles, AIN aportó hasta 370 vehículos, a menudo vehículos todoterreno, otras veces sencillas bicicletas que en algunos países son difíciles de conseguir. Además de financiar 930 proyectos de formación y 844 proyectos pastorales, un 8 por ciento de la cantidad gastada se dedicó a apoyar medios de comunicación. En Pristina (Kosovo), colabora en la construcción de la concatedral que será consagrada a la Madre Teresa de Calcuta. AIN fue fundada en 1947 por el monje premonstratense holandés Werenfried van Straaten, más conocido como «Padre Tocino».
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