Escuderías

Alonso se queda sin tiempo

La Razón
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Madrid- Hoy por la mañana los motores de la Fórmula 1 rugirán en el circuito de Jerez. La pretemporada 2008 ya ha comenzado y lo hace con Fernando Alonso lejos de este escenario. Las negociaciones con diferentes equipos le impiden empezar unos ensayos que, a diferencia de otras ediciones, adquieren mayor importancia debido a un sustancial cambio en el reglamento. La eliminación del sistema electrónico que controla la potencia que el motor manda a las ruedas significa una gran modificación en la conducción; así que, cuanto antes empiecen todos los pilotos, mucho mejor. Es lo que hacen en Jerez el vigente campeón, Kimi Raikkonen, Lewis Hamilton y todos los que aspiran a pelear por el título el año que viene, a excepción de Fernando Alonso. En 2008 la Fórmula 1 prescinde del control de tracción, una gran ayuda a la conducción que puede provocar muchas sorpresas. Este sistema se encarga de que las ruedas reciban la fuerza justa y necesaria en cada momento en función de la adherencia. Es decir, es el causante de que en las carreras las ruedas no derrapen ni se produzcan salidas de pista. Pero en los próximos años, esa función la tendrán que asumir los propios pilotos, que deberán «jugar» más con el pedal del acelerador. La cosa ya no será acelerar a fondo y levantar el pie así como así.

En los años 90, la Federación Internacional perseguía con tesón que los equipos no emplearan estos sistemas, pero ante la sospecha de que las escuderías los usaban de forma secreta y la imposibilidad técnica de detectarlos, en 2001 decidieron permitirlos. Fue el año en que debutaron en la Fórmula 1 pilotos como Alonso y Raikkonen; es decir, su adaptación a estos potentes monoplazas resultó más suave gracias a esta ayuda. Pero ahora toca el turno de correr sin control de tracción… y a lo mejor hay sorpresas. Quien mejor lo tiene es Lewis Hamilton, que hace apenas un año conducía un GP2 con algo menos de potencia y, por supuesto, sin control de tracción. En este sentido, el que más fresco tiene todo esto es el británico.

La ausencia de Alonso contrasta con todo lo ocurrido el pasado año. Removió Roma con Santiago para que Renault le dejara libre por un solo día y probar el McLaren. Fue por estas mismas fechas cuando el asturiano se presentó en el Circuito de Jerez con un mono blanco para dar unas cuantas vueltas y empezar el desarrollo del MP4/22 lo antes posible. Ahora que el control de tracción desaparece, estas prisas, incluso, estarían mucho más justificadas.

El caso es que el destino del español es toda una incógnita y además tiene el mercado paralizado. Todos los indicios apuntan a Renault, que sólo está esperando a lo que ocurra el jueves en la sede de la FIA con el caso de espionaje que pesa sobre ellos. Si no hay una sanción grave, incluso podría anunciarse este mismo día el fichaje de Alonso, aunque todavía está por ver lo que ocurre con Red Bull y, sobre todo, lo que pasa con las dos escuderías japonesas en 2008, porque para la siguiente campaña, el acuerdo con Ferrari puede ser una realidad.