ANPE censura la matriculación «a la carta» de los alumnos con 3 ó 4 suspensos

El sindicato de profesorado ANPE considera que el modelo matriculación "a la carta"acordado por Educación y las CCAA para los alumnos de primero de Bachillerato con tres o cuatro suspensos parece "fruto de la improvisación", sin consultarse al profesorado, y puede causar "conflictos"en los centros.
"Los estudiantes españoles abordan 17 materias distintas en sólo dos cursos de Bachillerato, que llegan a 19 en algunas comunidades autónomas. Es un diseño que no permite profundizar en la preparación necesaria para acceder a la Universidad", advierte ANPE en un comunicado.
Además de un Bachillerato de tres años, es "imprescindible"potenciar la Formación Profesional como alternativa de prestigio, asegura.
También encuentra "contradicción"en que se posibilite a los alumnos matricularse sólo de las materias no aprobadas y, además, cursar voluntariamente aquellas otras que la dirección del centro les recomienda, ya que los estudiantes podrían negarse.
Esto causaría "graves problemas en la organización"de los centros y en la relación con las familias, asegura el sindicato.
Por el contrario, la Federación de Sindicatos Independientes de Enseñanza (FSIE), mayoritaria en la enseñanza concertada, aprecia el acuerdo alcanzado entre el Ministerio de Educación y las CCAA, pero matiza que la programación de las materias y los horarios compartidos entre alumnos con necesidades diferentes supondrá una dificultad añadida a los centros y al profesorado para su organización.
"En la medida que se multipliquen los casos de alumnos 'repetidores parciales', la dificultad funcional será mayor en estos centros", advierte.
La base de la calidad, según FSIE, debe estar en el esfuerzo y "no en el recorte del fracaso y del abandono escolar mediante concesiones y medidas demasiado permisivas a cualquier precio".
También entiende como conveniente replantearse el currículo de la ESO y adaptar el Bachillerato en tres años.
Por último, la Confederación de Padres de Alumnos (COFAPA) insta el Ministerio a que busque soluciones más creativas.
Además flexibilizar el desarrollo de las etapas educativas postobligatorias, reclama medias de apoyo al profesorado y recursos y esfuerzos que hagan atractivo el estudio a los alumnos desde Primaria, "pero nunca bajar el nivel de exigencia y esfuerzo necesario en cursos posteriores".