Defensa amplía las misiones de España en Afganistán

Afganistán será pronto la misión más grande de las que España tiene hoy en día. Lo será temporalmente, pero desde el próximo mes de julio, en el país asiático habrá 1.230 militares españoles, después de que el Congreso aprobara ayer el despliegue de un batallón de 450 efectivos para asegurar las elecciones presidenciales afganas, que se celebrarán el próximo 20 de agosto, con la única oposición de IU. El batallón, compuesto por una compañía de mando y servicios, dos de infantería y otra de zapadores, se ubicará en la zona oeste, dividido entre Herat (sede del grueso del contingente) y la nueva base de Qala-i-Now. Los primeros efectivos llegarán la primera semana de julio y el 21 de ese mes se alcanzará la capacidad operativa plena. En principio estarán allí hasta 30 días después de las elecciones presidenciales.La ministra de Defensa, Carme Chacón, llegó ayer a la Cámara Baja con la petición de permiso parlamentario para esta misión y para otras dos: la primera, el envío de 66 militares y cuatro guardias civiles para gestionar y dirigir las operaciones del aeropuerto de Kabul durante siete meses desde el 1 de octubre; la segunda, 12 efectivos más para un equipo operativo de asesoramiento y enlace para patrocinar y adiestrar un batallón del Ejército afgano. A las tres misiones, la Comisión de Defensa dijo sí después de que la ministra hiciera un retrato de Afganistán mucho más duro de lo que acostumbraba a hacer el Ejecutivo. Así, reconoció que «nuestras Fuerzas Armadas se enfrentan a amenazas y problemas de seguridad frecuentes», para advertir a continuación de que «el desarrollo de los acontecimientos indica que la insurgencia va a seguir intensificando sus ataques». Ante esta perspectiva, la titular de Defensa anunció que en las próximas semanas, para acompañar al batallón electoral, se desplegarán 33 vehículos Lince, que permanecerán sobre el terreno una vez que el batallón regrese a España, aumentando la dotación de estos blindados a 93. Eso, a la espera de que se terminen de certificar los nuevos RG-31, blindados que sustituirán a los BMR. La ministra encontró el apoyo del PP, cuya portavoz, Beatriz Rodríguez-Salmones, reclamó más información sobre Afganistán y Pakistán, y mostró su preocupación por el equipamiento de las tropas en esa misión, que, dijo, «se ha convertido en una zona de guerra». Un convoy seguroChacón, preguntada por Llamazares, se refirió al proceso que se sigue contra dos militares que se negaron a llevar un vehículo entre Herat y Qala-i-Now alegando falta de protección del camión en cuestión, tal y como desveló LA RAZÓN el pasado 4 de junio. Aunque no quiso entrar a valorar el proceso judicial abierto contra los dos cabos del Ejército de Tierra que se negaron a cumplir la orden, sí que aseguró que el convoy en el que se encuadraba el camión Vempar que debían conducir «iba debidamente protegido» para el «nivel de amenaza» que tenía esa ruta.«No» a integrar las escalasLas graves consecuencias que entre todas las escalas está produciendo la Ley de la Carrera Militar llevaron ayer a la portavoz de Defensa del PP, Beatriz Rodríguez- Salmones, a pedir que se detenga la integración de escalas, el aspecto más polémico de la citada Ley. Chacón, que respondió que el Gobierno «tiene que cumplir las leyes y no pararlas», se comprometió a corregir todos los defectos que se detecten en la aplicación de la norma, y a consensuarlo con el PP.