«El vídeo-arte tiene los mismos sentimientos que la pintura»

Considerado como uno de uno de los más grandes renovaderos del arte contemporáneo gracias a la video-creación, Bill Viola ya forma parte de la nómina de galardonados con el Premi Internacional Catalunya, cuyo fallo se hizo público ayer. Viola, en declaraciones a este diario por teléfono desde su estudio en Long Beach, California (Estados Unidos), no disimuló su entusiasmo por el premio. «Estoy profundamente agradecido por esto porque creo que también es un reconocimiento al vídeo-arte. Cuando empecé a trabajar, hace mucho tiempo, no podía imaginar que se reconociero mi labor. Es un sueño que no sospechaba en mi juventud», explicó.Viola (Nueva York, 1951) empezó a trabajar en el vídeo-arte en la escuela de arte de la Syracusa University, donde estudió pintura y música electrónica.En 1972 creó sus primeros trabajos en esta disciplina, una labor que sigue realizando con indudable éxito. Así lo demostró al representar a su país en la Bienal de Venecia de 1995 o cuando el Metropolitan Museum of Art de Nueva York adquirió su pieza, «The Quintet of Remebrance», la primera instalación de vídeo que entró en su colección.Viola está convencido de que el vídeo-arte vive un buen momento porque «no para de crecer. Es una revolución gracias a la tecnología». Pero eso no le hace sospechar que la pintura o la escultura estén en crisis. «Es verdad que ahora todo puede ser más radical gracias a la participación de la tecnología. Pero no veo en esto una ruptura entre lo que hago y la pintura. En todo esto, independientemente del soporte, siempre está el deseo del ser humano por representar los sentimientos y la vida», afirmó Viola.El artista trabaja en la actualidad en dos proyectos. Uno de ellos es un vídeo-juego «en el que llevo trabajando cinco años. Es un recorrido por un paisaje que también lo es de uno mismo». La otra propuesta son dos piezas permanentes para la catedral de San Pablo, en Londres.Bill Viola recogerá el Premi Internacional Catalunya –dotado con 100.000 euros y una escultura de Tàpies– el próximo 30 de junio. Su estancia coincidirá con su participación en la exposición «Noches oscuras del alma», que tendrá lugar en Girona del 26 de junio al 20 de septiembre.