Sebastián Escarrer:«Hay que defender la marca España para ser competitivos en el extranjero»

Sebastián Escarrer nos recibe en una suite del remozado Gran Hotel Meliá Colón de Sevilla. Cuarenta millones de euros y dos años de trabajos en el mítico «hotel de los toreros» lo han elevado a la categoría de Gran Lujo y a ser todo un referente de los nuevos aires de vanguardia y confort, aliados con la tradición, que Sol Meliá pretende priorizar en sus establecimientos hoteleros de medio mundo. Desde su privilegiada posición dentro del negocio turístico, Escarrer aclara, además, algunas cuestiones ligadas a la crisis en el sector.-La del Colón ha sido una obra de gran calado en tiempos turbulentos. A toro pasado, ¿qué le parece el resultado de la remodelación? -Le hemos puesto todo el cariño y la profesionalidad que el hotel merece. Es el hotel de Sevilla, de los sevillanos. Representa señorío, felicidad y tradición, tres características de la ciudad. La remodelación se ha hecho para conseguir un lujo atemporal y recuperar la tradición de los toreros y de un pasado del que estamos orgullosos y contentos. -¿Qué distingue al Colón dentro de los establecimientos hoteleros de Sevilla y dentro de la cadena Sol Meliá?-En Sevilla le distingue su ubicación y lo completo que es, con spa y el restaurante «Burladero», regentado por Dani García, un chef con dos estrellas Michelin, que ha recuperado la tradición de las tapas. Las habitaciones son lo mejor que hay en la ciudad, con el mejor servicio, así como la simbiosis entre personas de larga trayectoria y profesionales de plantilla nuevos con múltiples idiomas y muy preparados. -¿Seguirá siendo el «hotel de los toreros», pese a la decidida apuesta por la vanguardia más extrema?-Ellos han sido los primeros en darnos la enhorabuena por la fusión de vanguardia y tradición.-La ocupación hotelera viene experimentando un descenso en los últimos meses en España, ¿qué cifras manejan en Sol Meliá?-El sector no es ajeno a la desaceleración y la crisis de consumo. Nos afecta a todos. En Sol Meliá barajamos bajadas de entre el 6 y el 7 por ciento. Lo estamos afrontando con un descenso similar en los precios. -Supongo que han tenido que variar el Plan Estratégico de la cadena, que finaliza en 2010...-Estamos adaptando las inversiones. Hemos destinado 100 millones, 75 de ellos a adaptación de productos y otros 25 para expansión. Estamos ejecutando una defensa de las principales posiciones que tenemos, tanto en Latinoamérica como aquí. -¿Necesita el sector algún tipo de apoyo o reforma?-Absolutamente. Sobre todo a corto plazo. Hay que pedir al Gobierno medidas adicionales al Plan Renove de establecimientos hoteleros. Las subvenciones son una medida insuficiente a largo plazo, además hay que romper con la tendencia a la destrucción de la competitividad, que está decreciendo en favor del Mediterráneo Oriental y el norte de África. Allí están arañando más cuota de mercado, mientras aquí no se hace una defensa de la promoción de la marca España en el extranjero. En vez de competir con esta marca, aquí se hace de forma más sectorial. -La caída del sector aéreo está golpeando fuerte al resto del turismo. ¿Se puede hacer algo?-España debe abandonar esa aberración de mantener las tasas más altas de navegación aérea de Europa. Hay que fomentar una nueva política de cielos abiertos y capacidad aérea. En este país, el segundo más turístico, se penaliza, en cambio. Canarias, por ejemplo, está estrangulada por no tener suficiente capacidad aérea.

PERFILMALLORQUÍN, de 43 años, es, junto a su hermano Gabriel, covicepresidente del mayor grupo de turismo vacacional del mundo. GESTIONA los intereses del lobby turístico Exceltur y recientemente ha sido elegido presidente del consejo de Wharton School. SOL MELIÁ tiene en perspectivas tres grandes hoteles en Shangái, Roma y Creta, entre otros proyectos.