La Carroña Para los Buitres

La noticia es del día 25, pero no parece haberse tomado con el interés que merece teniendo un impacto medioambiental de primera magnitud, resolviendo un problema que se estaba agravando por momentos y hasta poniendo en peligro a una importante fauna.Porque los buitres, con la prohibición de dejar en el campo a las reses domésticas que morían de eviscerar a reses salvajes abatidas en las cacerías, se estaban muriendo de hambre. Para no hacerlo, habían llegado a emprender viajes inauditos como el que llevó a un grupo de dos centenares hasta Holanda, Alemania y Bulgaria, hasta atacar animales como ovejas o vacas parturientas. Y no sólo los buitres, negro y leonado, el alimoche o el quebrantahuesos estaban afectados, también, en mayor o menor grado. De la carroña se aprovechan especies tan emblemáticas como el oso pardo (Hartasánchez, de FAPAS, llevaba tiempo pidiendo una solución), sobre todo a la salida de su hibernación, el águila imperial o el lobo. La gran noticia es que el Parlamento Europeo –de Europa llegó la directiva general obligando a la recogida de cadáveres– votó, a iniciativa de SEO/BirdLife, esa medida y existe ya acuerdo de la Comisión Europea y del Consejo de Europa para poderla aplicar. Ahora tendrán que ser los estados miembros quienes dicten sus diferentes normas, pero la posibilidad queda abierta. En España habrán de ser las CC AA quienes lo hagan. Algunas, como Madrid, estaban, previamente a esta votación, buscando la fórmula para poder aplicar lo que era de sentido común y que si bien pudo tener alguna razón en un momento, que no era mucha, ahora tan sólo era una fuente de problemas para la naturaleza y para los ganaderos.