Coronavirus
Médicos argentinos estigmatizados por los vecinos: “Nos dio mucha tristeza”
Algunos profesionales que se encuentran en primera línea contra el coronavirus no solo no reciben laureles, sino que son amenazados
Aunque desde hace 20 días, los porteños salen a los balcones a aplaudir la heroica labor del personal sanitario, otros profesionales que se encuentran en primera línea batallando contra el coronavirus no solo no reciben laureles, sino que son estigmatizados e incluso, amenazados.
En Santa Fe –noreste del país- Habló uno de los dos doctores a los que les colocaron un cartel en la entrada del edificio de Venado Tuerto –ciudad-, advirtiéndoles que debían irse porque contagiarían “a todos” de coronavirus. “No esperábamos algo así”, dijo el profesional
El médico residente Francisco Szeyfert, de 33 años, contó la desagradable experiencia que le tocó vivir junto a su compañero de residencia Agustín Haefelli. Días atrás, cuando regresaban muy cansados del hospital, encontraron un cartel con una dura advertencia en el ascensor del edificio: “Si eres médico, enfermero, farmacéutico o trabajas en salud, ¡andáte! –vete- nos vas a contagiar a todos”, decía la amenaza.
“No esperábamos algo así, tenemos buena relación con todos los vecinos”, confió el joven médico oriundo de la capital provincial. Luego consideró: “Yo creo que fue alguien anónimo y puntual, no creo que haya sido algo consensuado en el consorcio”. Francisco intentó buscar una explicación para semejante reacción: “La gente está con mucho miedo, recibe información que no es correcta y eso genera pánico”, apuntó.
Sobre el trabajo que hacen en el hospital público de la localidad santafesina, concluyó: “Es un hospital moderno, nuevo, la verdad que estamos muy a gusto”.
¡Vete de aquí!
Previo al caso santafesino, días atrás dos episodios de discriminación similares tuvieron lugar en Buenos Aires.
El primero ocurrió en el barrio de Belgrano, donde una médica del Hospital de Vicente López fue intimada por los vecinos de su edificio a no transitar por espacios comunes ni tocar picaportes ni barandas de la escalera.
En tanto, en Villa Crespo apareció pegado en el ascensor de un edifico un cartel que advertía: «Si eres médico, enfermero, farmacéutica o te dedicas a la salud, andate porque nos vas a contagiar a todos hdp».
En diálogo con LA RAZÓN, Fernando Gaitán, un farmacéutico que vive en el lugar, contó qué lo primero que hizo al ver el mensaje fuer llorar. “Me indignó mucho, porque yo salgo todos los días y expongo mi vida y la de los que viven conmigo, y la verdad que no es nada grato porque mi salud vale como la de cualquier otro”, dijo.
De esta forma, calificó la actitud de sus vecinos como discriminatoria, cobarde e infundada», y argumentó: “No estoy casi nunca en mi casa, no es que ando paseando por los pasillos de todos los pisos”. En tanto, se ofreció a conversar con las quienes viven en el edificio y a explicarles por qué su situación no representa un peligro para ellos y cómo pueden hacer para prevenir un posible contagio.
Mendoza –norte del país- tampoco no está exenta de esta realidad y aunque no hay datos oficiales al respecto, médicos y responsables de hospitales públicos de la Provincia reconocieron que durante su jornada laboral sufren incluso maltratos.
“Los maltratos son permanentes en la guardia, la gente está con un nivel de agresividad muy importante. Lo más habitual son los agravios verbales y puede haber alguna rotura de vidrio, o puntapié a una puerta”, describieron víctimas de estos episodios.
Las causas de esta realidad tienen que ver con un descenso en el nivel de tolerancia, una falta de respeto general y un proceso de aculturación. Cuanto más pasa el tiempo y se alarga la cuarentena, más pareciera que se pierde el civismo.
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