Internacional

Unos padres llaman a su hija como una compañía telefónica y ganan 18 años de Internet gratis

Los padres vieron un anuncio de la empresa Twifi a través de Facebook con la promoción y les pareció una gran oportunidad

La historia de la pequeña Twifia ha causado una gran conmoción en Suiza
La historia de la pequeña Twifia ha causado una gran conmoción en SuizaInstagram/Twifi.chLa Razón

Una pareja en Suieza decidió poner Twifia de segundo nombre a su hija pequeña después de acogerse a la promoción de una empresa de servicios de Internet, y consiguió de esta manera 18 años de Internet gratis, según recoge este martes el portal ‘LADbible’.

El progenitor vio la oferta de la compañía Twifi en Facebook y le pareció una buena oportunidad. Y es que según las condiciones de este proveedor, todos aquellos que llamen a su bebé Twifus (si es un niño) o Twifia (si se trata de una niña) y que lo demuestre con una foto del certificado de nacimiento, puede acogerse a esta promoción.

Por otro lado los padres, que prefieren permanecer en el anonimato, no han querido revelar el nombre completo de la niña porque afirman estar “un poco avergonzados”. “No queremos justificarnos porque la acusación de haber vendido el nombre de nuestra hija nos afecta mucho”, explicaron.

Asimismo, aseguran que el dinero que iban a gastarse en Internet lo depositarán en una cuenta de ahorros para la pequeña Twifia. De esta manera, cuando cumpla la mayoría de edad, los padres esperan poder usar ese dinero para comprarle un automóvil, aprenda a conducir o se cambie el nombre en caso de que lo odie.

Cuanto más lo pensaba más original me parecía el nombre, y fue entonces cuando la cosa tuvo su encanto”, confesó el padre. “Para mí el nombre Twifia significa conexión en este contexto. ¡Un vínculo eterno!”, dijo la madre, quien reconoce que en un primer momento no le atrajo la idea: “Hay nombres mucho peores, ¡y cuánto más a menudo decimos Twifia más cordial suena el nombre!”, señala.

En cuanto a Twifi, el jefe de la compañía Philippe Fotsch confirmó que su empresa pagará por el Internet de la pareja hasta el año 2038, incluso en el que caso de que el proveedor quiebre. “Es una cuestión de honor”, afirmó.