Nicaragua se ceba con González Laya, a la que llama “delirante trasnochada mandamás”

“La señora canciller del Reino de España ha hecho en estos días ofensivas declaraciones sobre Nicaragua y sobre el presidente de Nicaragua, recordándonos el cinismo y la desvergüenza de tantas tropelías y crímenes atroces cometidos por la Corona Española durante la brutal conquista de las sagradas tierras nuestro americanas”. El ministro de Exteriores de Nicaragua, Denis Moncada, comienza con estas palabras la carta dirigida a su homóloga española, Arancha González Laya, en la que denuncia la supuesta “injerencia” del gobierno español en sus asuntos internos y de mostrar “una ignorancia atrevida y una ferocidad impropia para la Diplomacia”.

“Mostrando una ignorancia atrevida, y una ferocidad impropia para la diplomacia, la señora González se dirige al presidente de un pueblo libre y soberano, con voz de alguacil, sin percatarse en su perorata delirante de trasnochada mandamás, que llevamos siglos sin dominio español, además de nunca haber reconocido bondad alguna en esos furibundos crímenes hispánicos, crímenes de lesa humanidad”, añade la carta del régimen de Ortega.

El régimen de Ortega ha proseguido la noche del viernes su ola de detenciones a miembros de la oposición con el arresto de Pedro Joaquín Chamorro, hijo de la ex vicepresidenta Violeta Barrios Chamorro, quien derrotó a Ortega en los comicios de 1990, hijo del periodista Pedro Joaquín Chamorro, asesinado por el régimen de Somoza en 1978, y hermano de la precandidata a las elecciones presidenciales de noviembre con mayor apoyo en los sondeos para derrotar a Ortega, Cristiana Chamorro. Cristiana se encuentra en arresto domiciliario desde el pasado 2 de junio.

El gobierno nicaragüense ha instado a España a “liberar a sus presos políticos” en relación a los líderes independentistas a los que esta semana el Gobierno de Pedro Sánchez ha concedido el indulto. El Ministerio de Exteriores español no ha respondido públicamente a las durísimas acusaciones del gobierno nicaragüense en un intento de no alimentar la polémica. Pedro Joaquín Chamorro es el último detenido en la arremetida del régimen de Ortega contra la oposición.

Las reprimidas del régimen de Ortega contra el Ejecutivo español se producen en medio de una ola de detenciones a políticos, periodistas, empresarios y activistas. El líder sandinista, quién comanda el país junto a su esposa, la vicepresidenta Rosario Murillo, ha emprendido una caza en forma de arrestos y hostigamiento contra la oposición política, mediática y social. Políticos de la oposición, entre ellos cinco precandidatos a los comicios de noviembre, empresarios, entre ellos el presidente de la principal organización empresarial, y registros en las redacciones de algunos medios de comunicación.

La misiva se produce tras las acusaciones este jueves del presidente Ortega contra las embajadas de EE.UU., España y otros países europeos de “intromisión” en los asuntos internos. Ortega acusa a estos países de organizar “reuniones con la oposición en la Embajada de EE.UU.” en Nicaragua. La UE, la Comisión de Derechos Humanos de la ONU y la Organización de Estados Americanos han exigido al gobierno nicaragüense organizar “elecciones libres y transparentes” en la cita del 7 de noviembre cuando los nicaragüenses están llamados a las urnas para elegir un nuevo presidente o reelegir por cuarta vez a Daniel Ortega. La oposición vaticina que Ortega vencerá al dar por hecho un fraude electoral ya que “no tiene el respaldo del pueblo nicaragüense”.

El régimen de Ortega ha tratado de esquivar las condenas internacionales reprochando a España su pasado colonial: “Denunciamos, la barbarie y la aniquilación genocida de nuestros pueblos originarios, el codicioso saqueo de nuestros recursos naturales, el avasallamiento de nuestras lenguas y culturas”.