Se endurecen los mensajes en redes sociales: perros que devoran cadáveres, una niña con una esvástica grabada en el estómago...

Conforme se prolonga la invasión rusa de Ucrania y los ataques a la población civil, singularmente en la ciudad de Mariupol, las imágenes que se difunden en las redes sociales cobran mayor dureza; el trato a los prisioneros, siendo correcto, se realiza sin ningún tipo de contemplaciones; se difunden imágenes de cadáveres alineados con la “Z” que llevan los vehículos del ejército de Moscú e, incluso, la fotografía del cadáver de un soldado ruso que es devorado por cachorros de perro.

Sean “fakes” o respondan a la realidad, lo que parece claro es que se quiere transmitir un mensaje de dureza, de que las cosas están cambiando y que la supuesta brutalidad rusa no va a quedar sin respuesta.

Como muestra de dicha brutalidad, se afirma en un mensaje publicado en Telegram, que soldados del Regimiento Azov encontraron en Mariupol el cuerpo de una niña con una esvástica quemada en el estómago. Precisamente, en una zona por la que habían atravesado las tropas chechenas que apoyan la invasión y que son conocidas por su falta de escrúpulos.

Todo esto lleva a comentar a un usuario de la red que “jls tropas rusas capturadas en diferentes áreas de Ucrania no recibieron el mismo trato que al principio, Hay videos circulando al respecto. Ucranianos ya ha anunciado que los MLRS (sistema de lanzamiento de cohetes) y las unidades de artillería no recibirán cuartel y lo mismo con las tropas enemigas en áreas sitiadas”.

Independientemente de la veracidad de imágenes y mensajes, que son difíciles de confirmar, lo cierto es que la mala planificación por parte de Rusia de su pretendida “guerra relámpago”, por más que ahora se diga que todo responde a una estrategia preestablecida (el número de bajas desmiente estos mensajes), y la presencia de chechenos y sirios entre los invasores, está creando un clima de gran hostilidad entre los ucranianos. Se habla, incluso, de violaciones de mujeres delante de sus hijos.

Con todo, de parte ucraniana, ante la falta de información de las autoridades rusas hacia sus ciudadanos, se siguen publicando, de acuerdo con los convenios internacionales, fotografías e información en ruso en canales de Telegram de prisioneros y muertos para que sus familiares tengan conocimiento de los que les ha ocurrido.

Las redes sociales, en cualquier conflicto, son un arma más de información-desinformación y resulta preocupante que los mensajes se vayan endureciendo ya que, de alguna manera, responden a una realidad que se impone por la mcerrazón rusa de mantener la invasión. Tal y como adelantó LA RAZÓN, Ucrania ya ha organizado la guerra asimétrica, “guerra de guerrillas”, para atacar la retaguardia, las zonas ya ocupadas por Moscú.