Entrevista

Coté Terre: "El agua potable es una crisis que se invisibiliza"

La directora ejecutiva de la ONG WATERisLIFE describe los principales retos de trabajar en África: "Toma muchísimo tiempo concretar los proyectos, la burocracia, los intereses, y las prioridades de la autoridad de turno afectan nuestros proyectos negativamente"

Coté Terre es una conocida periodista chilena afincada en Nairobi desde 2019, Directora Ejecutiva de la ONG norteamericana WATERisLIFE dedicada a la búsqueda de soluciones que mejoren el acceso a agua potable y saneamiento. En los últimos años han desarrollado proyectos de agua en África y América Latina.

Actualmente se encuentra en España como destino clave en su gira europea para concienciar y buscar apoyo para impactar a más personas que no cuentan con agua potable, una problemática muchas veces invisible, que afecta a más de 700 millones de personas en el mundo.

Usted es periodista, ha trabajado en la televisión chilena y ahora vive en Kenia como directora ejecutiva de la ONG WATERisLFE. ¿Cómo se produce este cambio?

En 2018 conocí a Ken Surritte, fundador de WATERisLIFE, una ONG global que busca llevar agua potable a todos quienes no la tienen, a través de proyectos de filtración. Comencé trabajando como voluntaria, pero cada día me fui involucrando más en los proyectos y misiones. A principios de 2019 viajé a Kenia para realizar un proyecto periodístico de dos semanas, pero la pandemia me dejó atrapada sin poder volver a Chile. El mundo se detuvo y mis proyectos se suspendieron, pero creo firmemente que la vida me llevó a donde debía estar, en Nairobi, donde pude ser testigo cercano de la cruda realidad del agua.

Inspirada por eso, me ofrecí para liderar los proyectos de la ONG en África. Fue un proceso muy arduo pero muy lindo a la vez. Incluso invité a mi mejor amigo de Chile a trabajar mano a mano conmigo. Pasaron dos años desde eso, y un día el Fundador nos dice que tomó la decisión de dar un paso al costado, con lo cual yo asumí como Directora Ejecutiva. Fue un tremendo orgullo, pero también un gran peso y responsabilidad. En este tiempo he visitado cientos de aldeas, campamentos y comunidades en distintas partes del mundo, y he visto el enorme impacto del agua potable, no solo en la salud de niños y adultos, sino también en su educación, en la economía local, e incluso en el medioambiente, reduciendo emisiones al no tener que hervir agua con leña y minimizamos desperdicio de plástico, al no tener que comprar agua embotellada.

Kibera, uno de los suburbios más grandes de África.
Kibera, uno de los suburbios más grandes de África.GONZALO PEREZ MATAFotógrafos

¿Cuál es el problema real del agua en Kenia y como están actuando desde WATERisLIFE?

Kenia no es un país donde el acceso a agua potable esté generalizado y sea accesible a toda la población. Por ejemplo, yo no tengo agua potable en mi casa. Hay que comprarla en botellas o bidones, o instalar sistemas de filtración. Hay agua en el país, pero su gestión y distribución no es eficiente, lo que se suma a que la potabilidad no es una prioridad.

En WATERisLIFE enfocamos nuestro trabajo en que las comunidades tengan acceso a agua potable para poder beberla. Buscamos lugares en los que existe una fuente de agua (ríos, lagos, pozos u otros que se encuentran subutilizados o inutilizados) para equiparla y un punto de acceso al agua potable, abierto para la comunidad, trabajando junto a las personas que viven allí, especialmente mujeres y jóvenes, para lograr la mayor eficiencia y sustentabilidad de los proyectos en el tiempo.

Kibera, unos de los suburbios más grandes de África.
Kibera, unos de los suburbios más grandes de África.GONZALO PEREZ MATAFotógrafos

A nivel global podríamos hablar de una doble problemática. O se le da mucha prioridad a la falta de agua por sobre la potabilidad, o el acceso agua potable no es una prioridad y se posterga. En ambas situaciones, el agua potable es una crisis que se invisibiliza. Eso pasa tanto en Kenia como en Chile o España. En nuestros países estamos acostumbrados a tener agua potable, por eso quienes no la tienen también son "invisibles". Hoy, WATERisLIFE existe para combatir esa crisis, apoyando a estas personas y visibilizando su realidad.

¿Además de Kenia, en que otros países de África están trabajando?

En los últimos dos años nos hemos enfocado en proyectos en Kenia y Ghana. Hemos crecido con fuerza también en América Latina, que es nuestra otra zona de impacto. Además de Kenia y Ghana, hemos trabajado en Brasil, Chile, Colombia, Puerto Rico, El Salvador, Costa Rica y Haití. Todos, lugares donde aún se necesita muchísima ayuda.

Niños del colegio público de Kambrembo cogiendo agua del río Nzoia en Kenia.
Niños del colegio público de Kambrembo cogiendo agua del río Nzoia en Kenia.Fotógrafos

¿Cuáles son las dificultades para trabajar con los gobiernos de África?

El principal problema es que toma muchísimo tiempo concretar los proyectos, la burocracia, lo intereses, y las prioridades de la autoridad de turno afectan nuestros proyectos negativamente. Otro punto, es que es habitual que gobiernos locales esperen que las ONG proporcionen los recursos económicos para los proyectos, por lo que hay bajo acceso a financiamiento público. Es por eso que nos vemos en la necesidad de buscar apoyo internacional en países como España.

Finalmente, y como en muchos países, hay elementos de corrupción que afectan el trabajo y el desarrollo para generar un cambio real. Todas, cosas con las que debemos lidiar a diario.

¿Cuáles son los proyectos a corto y medio plazo de WATERisLIFE?

Tenemos áreas clave de trabajo para lograr el mayor impacto. Una de ellas, es llevar agua potable a personas que viven en campamentos y poblaciones en zonas urbanas de África y América latina, como es el caso de Kibera en Kenia (slum con más de un millón de personas) o Dique da Vila Gilda en Brasil (la favela de palafitos más grande del país). Otra área clave, es llegar a lugares más remotos o alejados de las ciudades, donde la crisis humanitaria alcance niveles extremos, y donde se requiera acción inmediata, como es el caso del Norte de Kenia o La Guajira en Colombia, donde hoy tenemos presencia.

¿Cuáles son las metas que se han marcado?

Nuestra principal meta es alcanzar el millón de personas con acceso a agua potable en 2030. Para lograr esto necesitamos entrar en Europa. Durante los últimos 15 años, los esfuerzos de recaudación de fondos de WATERisLIFE han estado enfocados en Estados Unidos, pero hoy hemos alcanzado un grado de madurez que nos permite explorar nuevos espacios, siendo España el punto de partida de esta nueva aventura. Aquí existe una cultura humanitaria muy potente a la cual no hemos accedido todavía, donde hay grandes oportunidades de alianzas para generar un impacto real y concreto.

Tenemos muchas esperanzas puestas en España. En este corto tiempo que llevo aquí, ya hemos logrado apoyos importantes. Unos de ellos, es Kinship Law Partners, al mando de Pedro Fernández, quienes nos apoyaran con todo el proceso de registro y asesoría legal en el país, a modo pro-bono, como parte de su compromiso social.