Análisis

"El discurso violento nos lleva a un paso de la confrontación física"

Paul Schmidt, secretario general de la Sociedad Austriaca para la Política Europea, analiza para LA RAZÓN, los motivos detrás del aumento de la violencia política

Robert Fico, el primer ministro eslovaco, sufrió el miércoles un intento de asesinato
Robert Fico, el primer ministro eslovaco, sufrió el miércoles un intento de asesinatoEuropa Press

¿La creciente polarización política a la que asistimos está favoreciendo los episodios de violencia política?

Creo que un discurso tan duro, tan polarizado, nos acerca también a una violencia física. Hay que tener siempre muy presente que ya hemos visto algunos ejemplos de ataques físicos contra políticos en Alemania y ahora contra el primer ministro eslovaco, Robert Fico. No lo tenemos suficiente en mente. Hay demasiado confrontación y el discurso violento nos lleva a un paso de la confrontación física, lo que no es un discurso democrático ni es la base de la convivencia, que es el diálogo. Este diálogo parte de posiciones distintas que buscan el consenso, solucionar problemas, y no exagerar de tal manera que nos lleva a situaciones violentas. Y esta no es la forma europea de hacer política. Estamos en una situación donde no vemos buenos ejemplos, por los que los demócratas deben dar un paso atrás y darse cuenta de que la política también es un ámbito que debe dar ejemplo, de que dialogando es cómo se resuelven los problemas y no con los actos violentos tan terribles que estamos viendo.

¿Corremos el peligro de que esa polarización política se traslade a la sociedad?

La política tiene que dar ejemplo. La política es la manera de canalizar los intereses diferentes y tratar de llevarlos a buen puerto negociando y hablando y no multiplicar los conflictos. Si no buscamos ese objetivo, ¿cuál es el ejemplo que damos a la sociedad?. Creo que si uno defiende el modelo democrático de convivencia, debe defenderlo mucho más de lo que lo estamos viendo ahora.

¿Los partidos populistas y de extrema derecha fueron los que trajeron la polarización al discurso político europeo?

Con la llegada del populismo nacionalista, se ha dado un paso más hacia ese conflicto porque para que haya un conflicto debe haber más de uno. Esa relación tan tensa llega en un momento en el que se dan múltiples crisis y los populistas nacionalistas intentan hacer política subrayando y exagerando los problemas en vez de proponer soluciones. Cuando la política crece para dar titulares y la confrontación es más importante que la convivencia se debe a la llegada de este populismo nuevo que estamos viendo. No obstante, vemos que muchos ataques verbales y también físicos vienen de esos movimientos políticos. Tiene mucho que ver con la crisis migratoria de 2015, cuando se empezaron a politizar los temas de la identidad y la homogeneidad.

En el reciente ataque a un candidato socialdemócrata alemán, los autores eran menores de edad. ¿Por qué los más jóvenes se ven seducidos por esa violencia neonazi y de ultraderecha?

Un motivo es un grupo en esa generación que se siente perdido, frustrado y es una víctima fácil para ese populismo nacionalista. Existen razones económicas, razones emocionales. Un factor clave son los círculos cerrados que tienen influencia sobre ellos, burbujas apartadas del mundo real donde se dibuja una guerra de culturas.