Brexit

El UKIP consuma su giro a la extrema derecha

El partido promotor del Brexit elige a su cuarto líder en un año y se une a formaciones ultras como Alternativa para Alemania (AfD).

El UKIP consuma su giro a la extrema derecha
El UKIP consuma su giro a la extrema derechalarazon

El partido promotor del Brexit elige a su cuarto líder en un año y se une a formaciones ultras como Alternativa para Alemania (AfD).

Henry Bolton, ex militar y ex oficial de Policía, se convirtió ayer por sorpresa en el nuevo líder del UKIP. Se trata del cuarto dirigente que elige la formación euroescéptica en poco más de un año. Tras el triunfo del Brexit, el partido perdió políticamente su razón de ser. Actualmente se encuentra completamente dividido y en una profunda crisis de identidad, acrecentada además por la dimisión de Nigel Farage, quien para muchos sigue representando el espíritu de la formación. Aunque en las generales de 2015 el UKIP consiguió situarse como tercera fuerza política, en los comicios adelantados de junio, no llegó si quiera a los 600.000 votos. Muchos vaticinaron entonces que era el principio del fin, pero la formación insiste en que, a pesar de haber logrado sacar a Reino Unido de la UE, debe continuar para garantizar que el divorcio se cumpla.

Bolton, de 54 años, obtuvo el voto del 29,9% de los afiliados que asistieron a la primera jornada del congreso anual que la formación celebra en Torquay, al sur de Inglaterra. El nuevo líder, que advirtió durante la campaña de las primarias de que el UKIP podía convertirse en el «partido nazi británico» si elegía al candidato erróneo, se impuso en último momento a la favorita en las encuestas, la polémica activista anti-Islam, Anne Marie Waters, con estrechos vínculos con la extrema derecha, que finalmente quedó en segunda posición con el 21,3% de los votos.

Muchos de los 20 eurodiputa-dos del UKIP, que no cuenta con representación en Westminster, ya habían amenazado esta semana con dimitir si la activista se hacía con las riendas. El propio Farage, que sigue siendo líder del partido en el Parlamento de la UE, había advertido que el UKIP estaría «terminado» si se convertía en un movimiento anti-Islam. Es más, había valorado incluso la posibilidad de crear una nueva formación si Waters ganaba.

Ahora Bolton tendrá que lidiar con la guerra civil que viven sus filas, divididas entre los que abogan por una agenda nacionalista más sólida y los que apuestan por la modernización. Pese a que Waters quedó en segundo lugar, sus ideas más radicales han penetrado ya en el discurso oficial. En el congreso de Torquay estuvo invitado un miembro de la formación ultranacionalista alemana, Alternativa para Alemania, (AfD), cuya entrada en el Parlamento germano ha provocado un terremoto político en el país.