EI trata de ofrecer una «cara amable» y dice que negocia la libertad de los que secuestra

Expertos en la lucha contra el terrorismo yihadista consideran que la publicación, en la revista oficial del DAESH, el Estado Islámico, de las fotografías de dos personas secuestradas, un chino y un noruego, como “presos a la venta”, forma parte de la estrategia mediática de la banda criminal para.

Por una lado los islamistas pretenden lanzar el mensaje de que tratan de negociar la libertad de las personas que retiene contra su voluntad (en vez de degollarlas directamente), y, por el otro, ganar espacios en los medios de comunicación, sin que tenga que ser con la difusión de atrocidades.

El DAESH dedica las dos últimas páginas de su revista Dabiq número 11 a publicar las fotografías de los dos secuestrados y, bajo el título genérico, de “presos a la venta”, dan los datos de las víctimas: en el caso del noruego, Ole Johan Grimsgaard-Ofstad, dan la dirección de su domicilio en Oslo, sus estudios, la fecha de su cumpleaños y dónde nació.

“A quien pueda interesar de los cruzados (cristianos), los paganos, y sus aliados,así como lo que se conocen como organizaciones de derechos humanos, se comunica que este preso noruego fue abandonado por su gobierno, que no hizo todo lo posible para comprar su libertad...”, e indican un número de teléfono.

Esta oferta es “por tiempo limitado”, advierten.Lo mismo ocurre con el secueestrado chino Fan Jinghui.