Un hombre golpea a la primera ministra danesa, Mette Frederiksen, en el centro de Copenhague

La primera ministra danesa, la socialdemócrata Mette Frederiksen, fue golpeada este viernes por un desconocido en el centro de Copenhague, informó la Policía en un comunicado en el que también daba cuenta de la detención del presunto agresor.

Frederiksen se encontraba consternada por el incidente, aseguraba una escueta nota de su oficina sin ofrecer más detalles. «La primera ministra ha sido agredida y golpeada hoy por un hombre en Copenhague. Mette, naturalmente, está sorprendida por el ataque. Debo decir que esto nos sacude a todos los que estamos cerca de ella», aseguró el ministro de Medio Ambiente Magnus Heunicke.

La información sobre el incidente es aún escasa y se desconoce en qué parte del cuerpo fue alcanzada Frederiksen y a qué hora ocurrió la agresión.

La clase política danesa no tardó en condenar el ataque y desear una pronta recuperación a la primera ministra. «En democracia se utilizan palabras. No violencia. Ya no es más. Mis mejores deseos para la primera ministra», escribió el socialdemócrata Trine Bramsen en X.

El ministro de Economía, Morten Bødskov, calificó el incidente de «completamente loco» y «terrible», y el presidente del populista Partido Popular Danés, Morten Messerschmidt, escribió que «la violencia nunca está bien».

El principal candidato de la izquierda para las elecciones al Parlamento Europeo del domingo, Morten Løkkegaard, lamentó que el ataque «es impactante». «Es crucial para nuestra democracia que podamos debatir independientemente de la posición política y tener un debate fáctico. La violencia y los ataques socavan el debate público y, por tanto, nuestra democracia».

Todavía se desconocen los motivos de la agresión, pero varios políticos coinciden en que utilizar la violencia contra la primera ministra es un ataque a la democracia. «El ataque es totalmente inaceptable y un ataque a nuestra democracia», escribió la ministra de Digitalización e Igualdad, la liberal Marie Bjerre.

«No importa cuán grandes sean los desacuerdos políticos que podamos tener aquí en Dinamarca, nunca será aceptable volverse violento contra funcionarios electos u oponentes políticos», dijo el líder de la Alianza Liberal, Alex Vansplagh.

Frederiksen, de 46 años, ocupa la jefatura de Gobierno desde junio de 2019: la primera legislatura, al frente de una coalición de centro izquierda; y desde diciembre de 2022, a la cabeza de un Ejecutivo de centro con dos fuerzas de derechas.

El incidente se une a otros ataques recientes a políticos. El más grave ha sido el intento de magnicidio del primer ministro eslovaco, Robert Fico, el 15 de mayo en un tiroteo que le dejó entre la vida y la muerte.

Ese intento de asesinato y varias agresiones a políticos de distinto signo político en países como Alemania encendieron todas las alarmas en la UE por temor a una oleada violenta fruto del aumento del discurso de odio, los populismos y la división social.