Conflicto en Europa

Por qué Ucrania no puede ganar la guerra contra Rusia, según un experto occidental

El observador británico Anatol Lieven considera que la estrategia de Biden ahora es mantener la defensa ucraniana hasta después de las elecciones presidenciales estadounidenses

Ukrainian tanker Andriy Kharytonenkov, 23, looks out of his T-64 tank of the 17th tank brigade few moments before the battle in Chasiv Yar, the site of fierce battles with the Russian troops in the Donetsk region, Ukraine, Thursday, Feb. 29, 2024. (AP Photo/Efrem Lukatsky)
Russia Ukraine WarASSOCIATED PRESSAgencia AP

Rusia ha recuperado Avdiivka, su mayor avance bélico en nueve meses mientras Ucrania reconoce un momento de gran debilidad en el frente y una creciente escasez de armas por la falta de envíos de Estados Unidos. Las perspectivas no son nada buenas y cada vez más voces apuntan a un final negociado con la Rusia de Putin. Este es el planteamiento del analista y profesor británico Anatol Lieven, director del Programa Eurasia en el Instituto Quincy para el Arte de Gobernar Responsable y coautor de The Diplomatic Path to a Secure Ukraine, quien ha escrito un artículo en la revista "Time" en el que argumenta por qué Ucrania no puede ganar la guerra contra Rusia. A su juicio, Moscú ha demostrado superioridad en artillería y municiones. "Están disparando tres obuses por cada obús ucraniano", dice.

De acuerdo con Lieven, "la Administración Biden tiene toda la razón al advertir que sin una mayor ayuda militar masiva de Estados Unidos, es probable que la resistencia ucraniana colapse este año. Pero los funcionarios estadounidenses también deben reconocer que incluso si esta ayuda continúa, no hay posibilidades realistas de una victoria de Ucrania el próximo año, o el año siguiente. Incluso si los ucranianos logran aumentar sus fuerzas, Rusia puede profundizar aún más sus defensas".

"El presidente Volodimir Zelenski se ha visto obligado a reconocer discretamente la nueva realidad militar", escribe el autor, quien apunta que "la estrategia de la Administración Biden ahora es sostener la defensa ucraniana hasta después de las elecciones presidenciales estadounidenses (noviembre de 2024), con la esperanza de desgastar a las tropas rusas en una larga guerra de desgaste".

Aunque, según Lieven, la estrategia de EEUU parece sensata, lo cierto es que esto podría significar una mayor pérdida de territorios para Kiev, explica. "La implicación de que Ucrania permanezca indefinidamente a la defensiva –incluso si lo logra con éxito– es que los territorios actualmente ocupados por Rusia están perdidos. Rusia nunca aceptará en la mesa de negociaciones entregar tierras que ha logrado conservar en el campo de batalla".

El autor asegura que durante su viaje a Ucrania se topó con "muchos ucranianos" que en privado se mostraban favorables a aceptar la pérdida de territorios como precio a pagar por la paz y evitar así "años de guerra sangrienta con pocas perspectivas de éxito". "La implicación de que Ucrania permanezca indefinidamente a la defensiva –incluso si lo logra con éxito– es que los territorios actualmente ocupados por Rusia están perdidos. Rusia nunca aceptará en la mesa de negociaciones entregar tierras que ha logrado conservar en el campo de batalla", añade.

Lieven critica la postura maximalista de ex generales occidentales con Ben Hodges, quien cree que Ucrania puede derrotar a Rusia con más armas y que incluso podría recuperar Crimea. Lieven reconoce que los ucranianos han logrado "algunos éxitos notables contra la flota rusa del Mar Negro", pero advierte de que para recuperar Crimea (anexionada por Moscú en 2014), necesitarían poder lanzar un desembarco anfibio masivo, una operación muy difícil que está mucho más allá de sus capacidades en términos de barcos y hombres". A su juicio, los ataques a la infraestructura rusa son insignificantes dado el tamaño y los recursos de Rusia.

El observador británico cree que el dolor por la pérdida de territorio en Ucrania sería "más emocional que práctico" para Kiev, mientras que Moscú debería renunciar al plan con el que comenzó la guerra de "convertir a toda Ucrania en un estado vasallo de Rusia". "Porque los territorios ucranianos perdidos, están perdidos, y la membresía en la OTAN no tiene sentido si la alianza no está preparada para enviar sus propias tropas a luchar por Ucrania contra Rusia", concluye.