Falta visión comunitaria

- Se han producido dos graves incidentes en menos de una semana. ¿Existe voluntad política para frenar estas catástrofes?

–No. No existe una voluntad comunitaria para solucionar este problema. La clave reside en dos aspectos importantes a los que no se presta atención. El primero de ellos sería que la Comisión Europea convenciera a Malta a aceptar inmigrantes en su territorio, algo a lo que desde siempre se ha negado. El segundo, que sería necesario formar una Fuerza Naval europea en la que las unidades de los diferentes países trabajasen juntos en esta materia.

- ¿Cómo actuaría esa Fuerza Naval?

–Su labor consistiría en detectar las embarcaciones desde su lugar de origen y evitar que llegasen a territorios como Lampedusa, cuyas dimensiones son demasiado pequeñas. Por ejemplo, si se desviasen hacia la costa Calabria, su recepción no sería tan caótica y se les podría ofrecer mejores condiciones. La mayoría de las embarcaciones arriban a Lampedusa porque es la isla más cercana a África y donde les cuesta menos trabajo llegar, no por otro motivo, es más, allí no van a encontrar trabajo. Su finalidad es emigrar después hacia destinos como Alemania. Pero esto implicaría un acuerdo entre las fuerzas navales de países como Francia, España o Italia y no es sencillo. No es un problema de Italia o de España, sino de Bruselas. Por el momento no existe una voluntad de hacer una política de inmigración común, a pesar de que ahora tengan la oportunidad perfecta.

- El número de inmigrantes que llega a Europa por vía marítima, ¿qué porcentaje representa en el total de flujos migratorios?

–Es una cantidad muy inferior a la que llega a través de las fronteras terrestres. Y es ahí donde radica el grave problema de la inmigración. Es cierto que a través del mar es más llamativo e impactante por las tragedias que muchas veces acompañan, pero la cuestión más importante es la atención que los diferentes países europeos prestan potencialmente a los inmigrantes sea cual sea el modo en el que llegan a un país. Además, debemos de ser conscientes de que nuestras poblaciones necesitan gente joven, ya que la mayoría de los países europeos tiene una sociedad muy vieja.

- ¿Supone un paso adelante las ayudas que prometió Durao Barroso a Italia esta semana?

–No sirven soluciones puntuales de este tipo, deben producirse medidas a largo plazo. Tener una fuerza naval que esté las 24 horas del día vigilando los mares internacionales es fundamental. Lampedusa es el final del problema, no el principio del mismo. El origen de éste se encuentra en las costas africanas, de donde salen las embarcaciones y donde debemos estar presentes. Si en lo que se centran es en dar ayudas puntuales, como las de Lampedusa, no servirá de nada.

*Profesor de la Universidad Luiss de Roma. Preguntas realizadas por Ángel Nieto.