Golpe a la democracia

-El doble atentado de Turquía ocurre a unas semanas de unas trascendentales elecciones. ¿Tiene una motivación política?

-Sí, es un ataque con una clara motivación política que busca debilitar la posición de los partidos kurdos de cara a las elecciones de noviembre y a la postre, beneficiar al partido de Erdogan, AKP. Todo apunta, que el EI está detrás del ataque y vuelve a mostrar su capacidad de atentar en Turquía.

-¿Cómo puede afectar en los electores?

-Cuando te adentras en la sociedad turca la primera observación es su absoluta polarización. Los turcos están divididos entre los que respaldan a Erdogan y aquellos que están en contra. Quienes están en contra de Erdogan no sólo lo están por su ideología islamista (para algunos incluso fundamentalista) sino por su deriva autoritaria. En cierta medida, Erdogan está siguiendo el juego de Putin en Turquía. Este ataque probablemente no vaya a inclinar la balanza hacia un lado u a otro del espectro político. Probablemente va a reforzar posiciones de los pro Erdogan y los anti Erdogan. Quienes le respaldan van a seguir apoyándolo y quienes le rechazan también. Por tanto, no veo una salida en estas elecciones. Es posible que las urnas ratifiquen el status quo actual y Turquía siga sumida en una parálisis política.

-¿Erdogan sigue un doble juego con el grupo terrorista Estado Islámico?

-Sí, absolutamente. Pero no creo que esté jugando esta carta porque sea un político inteligente o maquiavélico, sino porque comparten cierta base ideológica. Erdogan respalda a toda organización que quiera establecer un Estado bajo el imperio de la ley islámica. Por eso respalda a la Hermandad Musulmana. El problema con el Estado Islámico es que ellos llevan hasta el extremo estos valores. En definitiva, parece que su apatía a la hora de combatir al Estado islámico se está volviendo en contra del país.

-¿Puede agravarse la situación de seguridad en Turquía de cara al 1 de Noviembre?

-Es posible que asistamos a una escalada de violencia en estas semanas de campaña electoral. En cualquier caso, no parece que el conflicto se vaya a resolver en el futuro cercano.

*Profesor del Centro de Estudios de Oriente Medio en la Univ. Berkeley