La ONU detiene al principal líder de las milicias «antibalaka» en República Centroafricana

Efectivos de la Misión Multidimensional Integrada de Naciones Unidas para la Estabilización de República Centroafricana (MINUSCA) han detenido a un dirigente de la milicia cristiana ‘antibalaka’, Rodrigue Ngaibona, buscado por crímenes como asesinato, rebelión, violación y saqueo, según ha informado la Fiscalía del país africano. Ngaibona, conocido como ‘Andilo’, fue detenido el sábado en la localidad de Bouca, situada a unos 300 kilómetros al norte de la capital, Bangui.

“Andilo es el más enigmático, temido y poderoso comandante de las milicias ‘antibalaka’”, han destacado expertos de la ONU en un informe publicado en octubre. El fiscal Maurice Dibert Dollet ha apuntado a un posible procesamiento en el Tribunal Penal Internacional, que investiga ya la violencia en el país.

Ngaibona fue trasladado a Bangui durante la noche del sábado al domingo y se encuentra bajo custodia de la policía judicial, según Dolet, que ha informado de la detención a través de la radio pública. La orden de arresto contra Ngaibona data del mes de mayo.

Sin embargo, dirigentes ‘antibalaka’ han advertido de que la detención de Ngaibona podría hacer peligrar la reconciliación y aseguran que el movimiento se ha convertido ya en un partido político. “Denunciamos el desorden en el que la comunidad internacional quiere mantenernos sumidos para perpetuar el caos en este país”, ha afirmado un portavoz ‘antibalaka’, Igor Lamaka.

Naciones Unidas cifra en miles el número de muertos y en 2,2 millones --alrededor de la mitad de la población-- el número de personas que necesitan ayuda humanitaria desde el inicio en diciembre de 2012 del conflicto entre la guerrilla musulmana y las milicias cristianas.

Además, más de 650.000 personas son desplazados internos, mientras que más de 290.000 han huido a los países vecinos buscando refugiarse lejos del conflicto, que ha tomado un cariz sectario con la toma de las armas por parte de las milicias cristianas y animistas.

Las investigaciones de la ONU han destapado una limpieza étnica perpetrada por los ‘antibalaka’ contra los musulmanes, comunidad minoritaria del país.