Centroamérica
Nasry Asfura, candidato a la Presidencia de Honduras: "El insulto y la venganza no pueden seguir gobernando"
Lamenta la falta de credibilidad de los políticos y afirma que la Administración Trump es "meramente económica"
El candidato por el Partido Nacional de Honduras a la Presidencia, Nasry Asfura, ha arremetido este martes contra aquellas "aparentes democracias" de Latinoamérica que utilizan "ideologías fracasadas" para "usar al pueblo como escudo sin hacer al final nada por él" y ha recalcado que "el insulto y la venganza no pueden seguir gobernando".
Asfura, conocido como Tito y de ascendencia palestina, ha descrito su "presencia en la vida política" como una cuestión vocacional y ha afirmado que la democracia merece "la lucha diaria". "Hay que hacerlo, hay que luchar por una democracia que se ve amenazada", ha aseverado durante un acto organizado en Madrid por el Foro Libertad y Alternativa.
"Los políticos estamos inmersos en unas contiendas de odio. Yo me separo de eso: en ningún momento he tenido una formación política. Estoy en política por formación de trabajo, después de 48 años trabajando en la empresa privada, en la construcción, entendiendo cómo se gana el dinero", ha sostenido, al tiempo que ha hecho hincapié en que a la población "no le interesa a veces quién gobierna sino quién le va a ayudar a resolver sus problemas".
En este sentido, ha aclarado que "no es lo mismo trabajar durante años en la parte privada antes de acceder a la política que no hacerlo". "Ahora podemos decir que sí se puede gestionar la parte pública como si fuera una empresa privada", ha puntualizado, antes de recordar su trabajo como alcalde de Tegucigalpa, la capital del país, entre los años 2014 y 2022.
"Tuvimos una gran oportunidad entonces y estoy seguro de que ahora el partido tiene ahora otra nueva oportunidad de lograrlo, de que el esfuerzo genere un cambio. Pero no todo esta ganado: hay que luchar, hay que defender la democracia yla libertad en equipo, como un gran esfuerzo de partido", ha sostenido. No obstante, el político hondureño ha alertado de que la formación se enfrenta a una "maquinaria de gobierno que tiene el control definitivo de todo". "No es imposible", ha dicho, aunque ha puntualizado que "la lucha vendrá después, en el periodo postelectoral" en caso de hacerse con la victoria tras los comicios presidenciales previstos para el próximo 30 de noviembre. Es por ello que ha pedido "proteger el voto" y "luchar de cara a los próximos siete meses frente a todo un aparato del Estado".
"Tenemos una gran oportunidad. Estamos cansados de tanto pleito entre unos y otros candidatos", ha señalado Asfura, que considera que es el empleo la principal preocupación de la población de Honduras. El candidato ha resaltado la importancia de "empoderar" a los alcaldes para que estos "desarrollen su trabajo y el país salga adelante", al tiempo que ha reivindicado la puesta en marcha de medidas que aborden problemas significativos antes de que "sea tarde".
Sin embargo, ha reconocido la falta de credibilidad de los políticos y ha lamentado que estos "prometan tantas cosas que luego no puedan cumplir todas sus promesas". "Es por eso que la credibilidad de los políticos en Honduras está por los suelos. Si no entendemos que tenemos que cambiar (...) será difícil sacar adelante a un país que es extremadamente rico", ha aseverado, no sin antes subrayar la importancia de hacer frente al cambio climático.
Sobre la situación política en el país, ha declarado que la estructura "todavía es semifuerte" y ha expresado que hay "esperanza". "Luchamos todos los días por lo que creemos, por lo que pensamos que debemos hacer y por el amor al país. Cada hora de cada día tenemos que luchar y no rendirnos", ha añadido.
En relación con la política arancelaria impulsada por el presidente estadounidense, Donald Trump, ha matizado que a pesar de la imposición de gravámenes del 10 por ciento ala importación de productos procedentes de Honduras, el país "sigue siendo competitivo". "La Administración Trump es una meramente económica. O estás con él o no lo estás. El tema económico es el que manda: es la presión, es el arma", ha explicado Asfura, que considera que un 10 por ciento sigue dando cabida a Honduras para ser competitivo en relación con otros países.
Aún así, lamenta que existe un problema: "el dinero no tiene fronteras, es miedoso, no quiere problemas, el Gobierno quiere tener rendimiento". "Si no cuidamos la inversión hondureña, la extranjera, y no damos la seguridad jurídica necesaria y la infraestructura necesaria para desarrollar el país, no va a haber manera de que venga inversión aunque seamos atractivos", ha argumentado. "Si no protegemos eso, no hay manera de que la inversión progrese. Tenemos que dar garantías, seguridad. Esto nos lleva a cosas importantes", ha zanjado.