Conflicto

Quién es quién: guía para no perderse en la guerra de Israel en Gaza

El ataque sin precedentes de Hamás fuerza la respuesta de Israel y agita Oriente Próximo

Sderot (Israel), 08/10/2023.- Israeli army move artillery units toward border with Gaza, 08 October 2023. Israel announced initiating a large-scale operation 'Swords of Iron' after surprise attacks on Israel on 07 October claimed by the Islamist movement Hamas killed more than 670 Israelis and left over 2,100 injured in the attacks, the Israeli army said 08 October. EFE/EPA/ATEF SAFADI
Israel lanza la operación «Espadas de Hierro» tras el ataque de HamásATEF SAFADIAgencia EFE

El ataque sin precedentes lanzado en la madrugada del sábado por Hamás desde la Franja de Gaza contra Israel deja a esta hora más de 600 israelíes y otros 370 palestinos muertos, según las últimas actualizaciones de los servicios de emergencias. La ofensiva sorpresa ha reavivado la llama de un conflicto histórico en un momento de profundas transformaciones en la región. Este es un repaso de los actores principales que están detrás del nuevo estallido de la violencia.

Hamás

El Movimiento de Resistencia Islámico, más conocido como Hamás, es una organización militante palestina que surgió al calor de la primera intifada como la rama local de los Hermanos Musulmanes. Domina la Franja de Gaza desde 2007, dos años después de que Israel se retirara de la zona en virtud de los Acuerdos de Oslo. Ganó en las urnas a su rival palestino, Fatah, que controla a su vez la Autoridad Nacional Palestina y gobierna en Cisjordania.

Persigue la destrucción del Estado de Israel y el establecimiento de una sociedad islámica. Aunque una revisión de sus bases fundacionales en 2017 llevó a la organización a suavizar su retórica y a aceptar la creación de un Estado palestino provisional a lo largo de la frontera de la Línea Verde, una delimitación establecida antes de la Guerra de los Seis Días de 1967.

El grupo ha defendido desde su fundación la resistencia armada como única salida al conflicto, negándose a las negociaciones con Israel. Sus miembros protagonizaron en la década de los 90 y principios de los 200 múltiples atentados contra israelíes. Israel y otros países como Estados Unidos y el Reino Unido, además de la Unión Europea, cataloga a Hamás como una «organización terrorista extranjera». Israel ha mantenido con la colaboración de Egipto un bloqueo sobre la Franja de Gaza desde que Hamás tomara el poder en 2007, alegando motivos de seguridad.

Brigadas Al Qasam

Es el ala militar de Hamás. Están dirigidas por Marwan Issa y Mohammed Deif. Desde la década de los 90 ha protagonizado atentados a gran escala contra objetivos civiles israelíes y ataques con misiles. Pero en la madrugada del sábado lanzaron un ataque sin precedentes en el sur de Israel.

Un selecto grupo de altos cargos de Hamás y Qassam, encabezados por Mohammad Dief y Yahya Sinwar, con la aprobación del politburó de Hamás en Líbano y Qatar, lideró la ofensiva. La milicia había realizado varios ejercicios militares de preparación. Al menos 20.000 miembros cruzaron a los territorios israelíes en el asalto, según medios gazatíes.

«Todo el mundo está hablando de Hamás, pero nadie analiza la situación en su conjunto», advierte el investigador Daniele Garofalo. «Las Brigadas Al Qasam, brazo militar de Hamás, tienen ciertamente la dirección y organización de las operaciones militares, pero es evidente que los grupos armados fuertemente activos son también las brigadas al-Quds, el brazo militar de la Yihad Islámica Palestina, las brigadas al-Nasser Salah al-Din y las brigadas de los Mártires Abu Ali Mustafa, el brazo militar del Frente Popular para la Liberación de Palestina».

Benjamín Netanyahu

Es el primer ministro que durante más tiempo ha ostentado el cargo en la historia de Israel. Declaró en la mañana del domingo el estado de guerra por primera vez en el país desde la guerra del Yom Kippur de 1973. Gobierna desde principios de año de la mano de ultraortodoxos y, por primera vez, de la coalición de extrema derecha supremacista judía Sionismo Religioso.

En su sexto mandato Israel ha ampliado los asentamientos en Cisjordania y ha tratado de sacar adelante una polémica reforma judicial que amenaza con socavar la independencia de los jueces del Tribunal Supremo. Sus planes han dividido a la sociedad israelí. En los últimos meses, cientos de miles de manifestantes han salido a protestar en varios puntos del país contra la medida. Pero la guerra ha promovido la unidad. La oposición propuso un Gobierno de emergencia para hacer frente a la guerra.

«Un pensamiento sobre Netanyahu. No es un primer ministro de guerra. No fue a la guerra contra Hizbulá e Irán y en Gaza normalmente se vio arrastrado. No confía en las “grandes” FDI, prefiere el poder aéreo y las fuerzas especiales y es reacio a las grandes ofensivas terrestres en las que las FDI pueden quedar empantanadas. Netanyahu intentó ignorar Gaza durante sus muchos años de mandato. Nunca hizo planes para su futuro y después de cada ronda de combates allí se apresuraba a volver a otros asuntos. Ahora será recordado para siempre por los israelíes por este desastre procedente de Gaza. Ese es ahora su legado», escribe el periodista Anshel Pfeffer, autor de una biografía del primer ministro, en la red social X.

Hizbulá

«En 2006, Hizbulá tenía un arsenal de unos 15.000 misiles –los más sofisticados proporcionados por Irán–. Hoy tiene 10 veces más. El peligro de una guerra en dos frentes para Israel, o quizá en tres si Cisjordania estalla en violencia, empieza a adquirir dimensiones existenciales», alerta el analista Bruce Hoffman.

La milicia chií libanesa es otro de los enemigos históricos del Estado de Israel. El denominado Partido de Dios, que controla en Líbano un Estado paralelo, secuestró en el año 2006 a dos soldados israelíes, desencadenando la guerra en la que se atribuyó la victoria en virtud de su supervivencia. Desde entonces, ha intentado utilizar el conflicto para justificar su necesidad de conservar las armas como fuerza de resistencia libanesa.

Las fuerzas de mantenimiento de la paz de las Naciones Unidas en el sur del Líbano sostienen que la situación en la frontera entre el Líbano e Israel era «volátil, pero estable», tras un intercambio de disparos de artillería y cohetes entre Hizbulá e Israel a primera hora del domingo.

La milicia dijo haber atacado tres puestos israelíes con proyectiles de artillería y misiles teledirigidos en la zona de las granjas de Shebaa, terreno que considera territorio libanés ocupado. Pero de momento no ha intervenido en la guerra, a pesar de los llamados de sus socios de Hamás.

Irán

El presidente de Irán, Ebrahim Raisi, mantuvo el domingo una conversación telefónica con Ismail Haniya, el líder del buró político de Hamás. Expresó su «aprecio» por los militantes del grupo, según un comunicado del movimiento. «Has hecho feliz a la nación islámica con esta iniciativa», dijo el presidente iraní en el comunicado.

Unas horas antes, el portavoz de las Brigadas Al Qassam, Abu Obaidah, agradecía públicamente a la República Islámica por proporcionar «armas, dinero y otros equipos» al brazo armado de Hamás: «Nos dio misiles para destruir las fortalezas sionistas, ¡y nos ayudó con misiles antitanque estándar!».

A pesar del tamaño, la escala y la complejidad del ataque sorpresa, ni los servicios de inteligencia israelíes ni occidentales anticiparon la operación, un factor que requiere una seguridad operativa extrema. Esto sugiere que hubo apoyo estatal externo, según los analistas. Todas las miradas apuntan a Irán, que financia las actividades de Hamás y Hizbulá, según las denuncias de Israel. Su participación pretendería mandar un toque de atención a Arabia Saudí, su rival en la región, en la antesala de la normalización de las relaciones con Israel.

Estados Unidos

Aliado histórico de Israel. El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha mostrado su apoyo «sólido como una roca e inquebrantable» a la defensa del país tras el ataque sorpresa de Hamás. La Casa Blanca ya ha ofrecido ayuda militar y asistencia a todos los niveles a las Fuerzas de Defensa Israelíes (FDI) y el Departamento de Estado ha confirmado la existencia de víctimas estadounidenses en el «ataque terrorista».

A pesar de las tensiones de los últimos meses entre la Administración Biden y el Gobierno de Netanyahu a cuenta de la reforma judicial, las relaciones bilaterales no se han visto resentidas. Subrayó Biden que Estados Unidos está del lado del Estado de Israel y que «nunca dejará de cubrirle las espaldas».