Política

Canadá

Una decisión ajustada

La Razón
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l Varios estados americanos ya reconocían el matrimonio homosexual. ¿Qué cambia la decisión del Tribunal Supremo?

–Implica que el Gobierno Federal debe reconocerlo y no podrá negarles ningún beneficio legal hasta ahora reservado a las uniones heterosexuales, sobre todo en relación a asuntos de Seguridad Social, Hacienda e Inmigración. Sin duda es un día histórico para los defensores de los derechos de lesbianas, gais y transexuales.

l ¿Qué casos concretos han llevado al Alto Tribunal a pronunciarse sobre un tema tan controvertido?

–Fundamentalmente dos. El primero, el presentado por Edith Windsor, una viuda de 83 años de Manhattan, que se vio obligada a pagar 360.000 dólares en impuestos federales por una herencia cuando falleció su esposa, con la que se casó legalmente en Canadá. No hubiese tenido que hacerlo si hubiese estado casada con un hombre. El segundo hace referencia a la denominada Proposición 8, que en 2008 anuló la ley que permitía a las parejas del mismo sexo a casarse en California.

l ¿Cuál ha sido la reacción de los estadounidenses?

–Evidentemente, depende de los grupos sociales y de su ideología. Además, nadie tenía claro que el TS se manifestara a favor de los homosexuales. De hecho, ha sido un fallo muy ajustado.

l ¿Cuál podría ser el próximo desafío en esta materia?

–Sería necesario hacer hincapié en casos de violencia homosexual y discriminación, que todavía son una lacra en nuestro país.