Una minicumbre sobre el futuro de Juncker

David Cameron se reunió ayer en Suecia con Angela Merkel para mostrarle, una vez más, su rechazo ante Jean-Claude Juncker como candidato para presidente de la Comisión Europea. El ex primer ministro luxemburgués es el relevo natural del portugués José Manuel Durao Barroso por su condición de candidato del Partido Popular Europeo (PPE), ganador de los comicios celebrados a finales del mes pasado. Se trata además de la opción preferida por la canciller alemana. Sin embargo, la oposición de varios países, con Reino Unido a la cabeza, ha paralizado un proceso que debe culminar en la cumbre que tendrá lugar los próximos 26 y 27 de junio, en la que los jefes de Estado y de Gobierno de la UE deben proponer por mayoría cualificada un nombre para que luego lo vote el Parlamento Europeo. El primer ministro británico llegó a amenazar la semana pasada incluso con la salida de su país de la UE si Juncker accedía al puesto. El «tory» lo ve como un representante de la «vieja guardia» que se opone a las reformas que Londres necesita negociar antes del referéndum sobre la permanencia en la UE al que Cameron se ha comprometido para 2017 ante el auge del euroescéptico Ukip. Merkel y Cameron estarán acompañados por el holandés Mark Ruttey y el anfitrión, el sueco Fredrik Reinfeldt. La minicumbre en la residencia de verano del primer ministro sueco en Harpsund finalizará hoy por la mañana con una comparecencia pública conjunta de los cuatro líderes. Entre los temas de la agenda también se encuentran las políticas de estímulo para afianzar la recuperación económica.