Isabel Pantoja, camino de la libertad condicional

Por decisión de la Junta Tratamiento, la cantante tendrá que ir a dormir de lunes a jueves a la prisión de Alcalá de Guadaíra y podrá salir días completos de viernes a lunes.

A primera hora de la mañana del jueves, la Junta de Tratamiento se reunía para concretar la modalidad de grado que le iban a conceder a Isabel Pantoja. Había varias opciones y la Junta deseaba estudiar la más beneficiosa para la interna. Podían aplicarle el artículo 82.1 de la Ley Penitenciaria, que es el régimen abierto más restringido porque «se limitan las salidas debido a determinadas características psicosociales de la persona». También le podrían haber aplicado el artículo 86.4, que «posibilita una forma específica de cumplir condena en régimen abierto, sustituyendo el tiempo de estancia mínimo obligatorio en el establecimiento por medios telemáticos». Esta modalidad de tercer grado no se le ha aplicado porque la propia interna no estaba de acuerdo.

Tres noches a la semana

El Centro Penitenciario de Alcalá ha decido que Pantoja disfrute de la modalidad basada en el artículo 83.3, por el que tendrá que ir a dormir de lunes a jueves a la prisión de Alcalá de Guadaíra y podrá salir días completos de viernes a lunes. Esta modalidad ha sido aprobada por mayoría, aunque no todos los miembros de la Junta estaban de acuerdo y preferían que Pantoja saliera con la pulsera telemática. Pero dicha modalidad planteaba serios problemas de adaptación al entorno de la interna por la falta de cobertura en Cantora, y dicho acople iba a suponer un retraso de casi diez días en lograr una instalación adecuada. Con la aplicación de la modalidad del artículo 83.3, podrá trabajar los fines de semana en cualquier lugar del territorio español en el que sea requerida. Cosa que difícilmente podría hacer con otras modalidades de grado establecidas. Con el tercer grado, debería dormir en los módulos específicos para su nuevo estado de semilibertad. Pero la cantante, curándose en salud, ha enviado un escrito al Centro solicitando permanecer en su misma celda y módulo. No sabemos todavía qué decidirá la Dirección de la Prisión de Alcalá. Una de las condiciones de su libertad condicional es, por supuesto, que no puede volver a delinquir; en caso de que lo hiciera, volvería a ingresar a la cárcel.

Ahora bien, por todos es sabido que ninguna de estas modalidades era la requerida por la cantante y su abogado, Carlos Esteban Romero. Pantoja deseaba un régimen de semilibertad muy abierto y acudir a firmar al juzgado dos veces al mes. Aplicando la modalidad basada en el artículo 83.3, el centro penitenciario podría solicitar la libertad condicional para Isabel Pantoja.

Navidad en casa

Y eso es lo que han hecho. La Junta de Tratamiento propuso ayer, por unanimidad, la libertad condicional para la cantante, basándose en la reforma de la ley penitenciaria del pasado 1 de julio y aplicando el artículo 90.3 que es «excepcional, para primarios que cumplan condenas de prisión no superiores a tres años, que hayan extinguido la mitad de la condena y cumplan el resto de requisitos básicos (tercer grado y buena conducta)».

Hacen hincapié en la buena conducta de la interna, que ha colaborado en diversas actividades dentro de prisión, como en las labores de costura, bien a mano o con una máquina de coser del siglo XVIII. Todo sin acudir a los talleres para evitar polémica con las 56 funcionarias que firmaron el escrito denunciando trato de favor hacia ella.

Los miembros de la Junta creen que, como mucho, en 20 días la cantante podrá disfrutar de dicha libertad condicional. Todo depende de la rapidez y diligencia en la respuesta del Juzgado de Vigilancia Penitenciaria. Creen que con las circunstancias «especiales» de Pantoja todo va a ir rápido. Por otro lado, con el tercer grado tendrá derecho a «vacaciones de Navidad». Podría salir en Nochebuena y no regresar hasta Reyes. A lo mejor, algún día debe regresar a la prisión de Alcalá de Guadaíra para firmar, pero poco más. Por este motivo, desde el centro estiman que, «con suerte», tras las fiestas no tendrá que regresar si los juzgados le han otorgado la deseada libertad condicional. Eso sí, este domingo regresará a prisión tras finalizar los seis días de su cuarto permiso ordinario correspondiente a su segundo grado. Lo que no han podido confirmar dichas fuentes es si Pantoja tendrá que dormir esa noche en su módulo o bien volver a Cantora, para regresar al día siguiente al centro penitenciario que tantas ganas tiene de dejar atrás.