Richy Castellanos: «Soy como un Seven Eleven, trabajo las 24 horas del día»

Tras el éxito de su último acto benéfico en el estadio del Rayo Vallecano el 27 de diciembre, Richy Castellanos nos habla de su presente, pasado y futuro. Por María SUÁRez y Andrea Sánchez

Tiene claro que no va a relajarse, que tras todos sus éxitos éste es su momento y no va a parar ni a darse por vencido. Es espigado, fibra y nervio en estado puro. Durante todos los años que lleva como relaciones públicas ha compaginado lo mejor que tienen los tan dispares mundos de la moda, el fútbol, el toreo, el cine, el teatro... el espectáculo en general. Ha sabido extraer lo mejor de cada uno de estos campos e imprimirles su personalidad. El mundo del deporte perdió a un futbolista de élite, pero las relaciones públicas ganaron a uno de los profesionales que sabe sudar la camiseta cada día. Lleva más de 23 años trabajando y viviendo su pasión, que es ayudar a aquellos que lo necesitan.

–¿Cómo ha llegado a ser uno de los grandes impulsores de actos benéficos?

–En la vida lo primero que hay que ser es persona, antes que profesional. A todo el mundo le gusta brillar, pero por circunstancias hay veces en que esa luz se apaga. Creo que hay momentos en la vida en los que debes demostrar una sensibilidad especial con la persona que tienes al lado. Hay bastante gente que está sin comer, que no tiene hogar y en cierto modo yo puedo contribuir con estos actos y ayudar a quienes más lo necesitan. Es una de las sensaciones más gratificantes que se pueden llegar a experimentar.

–Un partido de fútbol de artistas contra toreros fue el último acto benéfico que ha celebrado.

–Sí. Fue el 27 de diciembre y se convirtió en un verdadero éxito porque la gente cada vez se implica más en buenas causas y en este caso el marcador quedó en un 6-6 bastante reñido. En el acto benéfico de ayuda contra el cáncer participaron más de 50 artistas que, de manera desinteresada, decidieron hacer un alto en sus ajetreadas vidas, parar, detenerse un momento y ver cómo podían ser útiles a quienes más lo necesitan. Me tendieron la mano para sacarlo adelante y me siento enormemente agradecido a ellos, y sobre todo al presidente Raúl Martín Presa y Luis Yánez, quienes me cedieron de nuevo la posibilidad de disputar este partido en el estadio del Rayo Vallecano.

–¿Fue complicada la organización?

–Montar actos como éste es un completo caos, no es nada sencillo reunir a tanta gente por una causa solidaria, pero a pesar de todo, son humanos y el tiempo se saca de donde sea. Las agendas se ajustan para hacer un hueco por una causa noble y poder contribuir a ayudar en esta enfermedad tan dura. Cuando termina el partido sientes una inmensa satisfacción por dentro. Ahí es de verdad cuando soy consciente de la pasión que siento por lo que hago y de lo sencillo que resulta contribuir con sólo tres euros a una causa tan noble.

–Imagino que a lo largo de su carrera habrá tenido grandes días y otras experiencias menos agradables. Seguro que no todo ha sido tan sencillo y habrá tenido momentos buenos y momentos malos.

–Bueno, el mejor recuerdo no sabría decirte cuál ha sido, ya que cada uno es especial, pero cualquiera que sea benéfico y tenga una iniciativa solidaria y salga adelante. Y los peores se olvidan. De los buenos, que ganan por goleada, tengo maravillosos recuerdos.

–Por ese motivo en 2015 fue condecorado con el premio honorífico por su labor social...

–Sí, me dieron el Premio al Mejor Relaciones Públicas Internacional Luxury, un grato momento para mí, ya que estuve nominado con marcas como Tiffany’s, Ferrari o la revista «Woman».

–¿Cuál es el próximo proyecto de Richy Castellanos?

–Ahora estoy inmerso en la preparación de los premios Forqué, que se celebrarán en el Palacio de Congresos de Madrid el 11 de enero. Todos los grandes del cine y del teatro a nivel nacional e internacional estarán allí. También preparo la presentación del disco de mi compañero y amigo Diego «El Cigala» en el Teatro Real y la promoción de la gira de otro de mis grandes amigos, Pitingo. El trabajo más reciente que hice fue la colaboración en el programa de José Mota de Nochevieja junto con muchos más colegas de la profesión para despedir el año. Tenemos que reírnos más. Y me siento muy orgulloso de haber grabado el videoclip del single de Julio Iglesias, con el que hemos conseguido más de 14 millones de visitas en el mundo y en el que conseguimos reunir a deportistas, futbolistas, actores y famosos como Rafa Nadal, Luis Figo, Cristiano Ronaldo, Vicente del Bosque, Pepe Reina, Iker Casillas, José Mota, Jesús Álvarez...

–¿Cuántas horas le dedica Richy Castellanos al trabajo? Su móvil debe de echar humo...

–Pues llevo un cable cargador siempre porque nunca me relajo porque me considero como el Seven Eleven, estoy de servicio las 24 horas del día. Cuando me preguntan qué es lo que más me gusta hacer siempre respondo lo mismo: trabajar. Si tú haces bien tu labor y dejas sello, la gente te lo agradece, te llama y vuelve a confiar en ti en el futuro.

–¿Cómo ha llegado tan lejos en el mundo de las relaciones públicas?

–Soy muy tenaz, transparente y bastante intuitivo y quizá esas tres cosas han hecho que llegue hasta aquí. A mí lo que me gustaba de verdad era el fútbol, pero una lesión hizo que tuviera que dejarlo para siempre. Y probablemente lo que me hace tener éxito y trabajo es que sé perfectamente satisfacer las necesidades de quien me contrata sin que me lo tengan que pedir.

El lector

«No suelo leer mucho los periódicos, pero sí que me gusta estar informado y seguir la actualidad, aunque no estoy habituado a comprarlos. Sólo cuando me alojo en los hoteles, o cuando tengo tiempo en algún restaurante. LA RAZÓN es de los que más leo, junto con “El Mundo”. Pero como lector, soy más de las páginas web de los periódicos».