El preguntón
¿Cuánto tiempo podemos aguantar sin dormir?
Más de 72 horas sin conciliar el sueño empieza a poner en serios aprietos a nuestra salud. Provoca falta de concentración, motivación y percepción. Se pierde visión, oído e incluso tacto
Más de 72 horas sin conciliar el sueño empieza a poner en serios aprietos a nuestra salud. Provoca falta de concentración, motivación y percepción. Se pierde visión, oído e incluso tacto
La pregunta puede contestarse desde la fisiología (analizando el tiempo medio que tarda un ser humano en enfermar mortalmente por falta de sueño) o desde la casuística. Esta última aproximación es menos rigurosa, pero más divertida. Según algunos registros, en 1965 el joven de 17 años Randy Gardner estuvo despierto 11 días (unas 264 horas) superando el récord de 8 días que había sido previamente establecido. Pero estos registros están tomados de ferias, espectáculos y concursos científicos muy habituales en la primera mitad del siglo pasado, aunque poco creíbles.
Lejos de estos eventos, es difícil pasar sin dormir más de 72 horas sin empezar a poner en serios aprietos a nuestra salud. Al principio, la falta de sueño genera falta de concentración, motivación y capacidad de percepción (se pierde visión, oído e incluso tacto).
En situaciones de falta de sueño prolongado se producen incluso casos de estados alterados de la conciencia en los que el cerebro duerme aunque los ojos permanezcan abiertos, causando alucinaciones al sujeto.
Algunas enfermedades neurológicas producen incapacidad permanente para quedar dormido. Es el caso del corea de Morvan, un mal degenerativo. Un caso documentado en Francia refiere a una persona que pasó varios meses sin poder conciliar el sueño reparador. En teoría, las personas que padecen ese mal no sienten cansancio ni señal de alarma, pero sí experimentan alucinaciones diariamente.
Algunas investigaciones aseguran que la falta de sueño causa daño cerebral, ya que se han encontrado gran concentración de moléculas propias del cerebro en la sangre de los voluntarios que pasaron toda una noche sin dormir. Su estudio muestra que una noche de privación de sueño puede causar pérdida de tejido cerebral, lo cual se demuestra por las altas concentraciones en la sangre de dos moléculas del cerebro después de la noche de insomnio. Durante un estudio realizado en Suecia, quince hombres de peso promedio experimentaron una noche de privación de sueño, y después una de ocho horas de sueño. Los investigadores encontraron que los niveles de estas moléculas en la sangre fueron mayores por la mañana después de la privación de sueño, en comparación con la mañana después de una noche completa de descanso reparador.
Anteriormente, otros investigadores de la Universidad de Surrey encontraron que la falta de sueño también puede tener un impacto en los genes, siendo las consecuencias de una semana de no descansar lo suficiente (menos de seis horas de sueño cada noche) causante de cambios en más de 700 genes, aunque los investigadores destacaron que la función de cada gen todavía no se entiende completamente, por lo que es imposible definir un umbral máximo de horas de sueño en el que universalmente todos los seres humanos empecemos a sufrir daños irreparables.
¿Existen los cementerios de elefantes?
Eso es lo que cuentan las leyendas africanas: que hay lugares a los que estos animales (los más grandes que pueblan la Tierra) acuden cuando sienten que van a morir para fallecer junto a sus congéneres. Pero los etólogos descartan la existencia de tales santuarios. Posiblemente, la creencia proceda del hallazgo de acumulaciones de huesos de elefantes muertos en similares circunstancias, por una cacería masiva, falta de alimento o colapso de un grupo en un área cerrada determinada. Dichas leyendas animaron a muchos exploradores del siglo XIX a buscar estos santuarios con la esperanza de apoderarse del abundante y preciado marfil que podrían encontrar allí.
¿Cuándo empieza a dejar de crecer un árbol?
Según se desprende de algunas investigaciones científicas que se han llevado a cabo recientemente cuando el tamaño es tal que el sistema interno de suministro de líquido no logra hacer llegar agua a toda la envergadura de un árbol comienza a dejar de crecer. Y es que la razón entre la eficiencia y la seguridad del transporte de alimento tiene un límite. Y ese límite se sitúa en los 110 metros aproximadamente, que es la altura que alcanzan las secuoyas más elevadas que se han encontrado en nuestro planeta.
✕
Accede a tu cuenta para comentar